El debate acerca del futuro del diésel no solo afecta a nuestro país, donde el nuevo etiquetado de la DGT ha causado grandes quebraderos de cabeza. Es un tema candente en Alemania, especialmente tras el escándalo del Dieselgate del Grupo Volkswagen. Este escándalo ha motivado a varias ciudades a prohibir el acceso a su centro a los diésel más antiguos, incluso contemplando su prohibición en ciertos tramos de las Autobahn. Pese a todo, Alemania se niega a cerrarle la puerta al diésel y las cifras de ventas lo demuestran: Volkswagen dobla sus ventas de coches diésel en 2018.
Tal y como lo oyes. Según una nota de prensa publicada ayer por el gigante alemán, las entregas de coches diésel aumentaron en 4 puntos porcentuales en 2018. Del total de vehículos vendidos por la marca en Alemania, el 43% montaban una mecánica diésel – frente al 39% en 2017. Ahora bien, ¿por qué digo en el titular que sus ventas de coches diésel se han doblado? Porque ese incremento de cuatro puntos porcentuales se refiere al total de ventas. La cuota de ventas de coches diésel se ha prácticamente doblado en el canal particular, donde en 2018 el 27% de los coches montaban una mecánica de ciclo Diesel.
En 2017, sólo el 15% de los clientes particulares de Volkswagen en Alemania habían confiado en las mecánicas diésel – posiblemente porque el escándalo del Dieselgate estaba aún muy reciente. El consejero delegado de Volkswagen, Jürgen Stackmann, afirma que el debate acerca del diésel es una montaña rusa de emociones, y que en muchas ocasiones se olvida la objetividad. Dejando a un lado la diatriba de la alta dirección de la marca, la realidad es que las mecánicas diésel siguen siendo más eficientes, y a igualdad de prestaciones, emiten menos dióxido de carbono que las mecánicas de gasolina.
En un escenario de lucha feroz contra el cambio climático, los motores diésel siguen siendo una de las mejores armas. Si recorremos un elevado número de kilómetros al año y nuestra conducción es fundamentalmente extraurbana comprar un coche diésel sigue siendo una excelente idea. Como siempre, los extremos son perjudiciales: no es recomendable comprar un coche diésel para recorrer unos pocos miles de kilómetros por ciudad, y tampoco es recomendable desde un punto de vista económico y medioambiental comprar un coche de gasolina para cruzar España una vez a la semana.
Si tienes dudas sobre si comprar un coche diésel o un coche de gasolina, házte estas preguntas. Y no olvides repasar nuestro artículo sobre el AdBlue, un aditivo que prácticamente todos los coches diésel modernos usan para reducir sus emisiones de óxidos de nitrógeno, además de sus avanzados sistemas anticontaminación.