¿Discreto? ¿Y qué pasa con ese alerón? ¿Y las ruedas lisas más anchas que el amor de Alonso por la F1? Vale, lo reconozco, el color rojo tampoco ayuda a pasar desapercibido, pero la gota que colma el vaso viene cuando lo oyes arrancar y sientes en el pecho un motor V10 de Fórmula Uno. Te presento al Alfa Romeo 164 ProCar. ¡Mira sus fotos en la galería y presta atención a la historia que tiene detrás!
Alfa Romeo 164 ProCar ¿Qué sentido tiene?
¿Sentido? Probablemente ninguno. De hecho, que este coche exista se debe a una cadena de infortunios, pero deja que te ponga primero en el antecedente de qué demonios es eso del ProCar. La ProCar Series fue, por decirlo de alguna manera, una categoría que hacía de telonera para las carreras de F1 en los 80. El ejemplo más sonado de estas series era el BMW M1 ProCar.
Los mejores pilotos del mundo, como Niki Lauda o Piquet, se ponían al volante de estas máquinas para hacer las delicias de los espectadores en una gran exhibición. A mediados de la década, Bernie Ecclestone, el tipo de mandaba ideó la Fórmula S, en la que se partirían de vehículos de calle transplantados con mecánica de F1. Aquí es donde entra en juego el protagonista de este artículo.
¿Por qué se fabricó el Alfa Romeo 164 ProCar?
Antes mencioné lo de la cadena de infortunios. Para entenderla, hay que mencionar a un tipo llamado Pino D’Agostino, quien rechazó los V8 y V12 para quedarse en un término medio, el V10. Creó un bloque de 10 cilindros en V a 72° y 3.5 litros con código V1035. ¿Me estoy pasando de friki? Aquella obra de arte desarrollaba una potencia de 620cv a 13.300rpm y algún otro flipado compró una unidad hace un par de años en una subasta de Collecting Cars por unos 35.000€.
Empezaron a salirle novios y la escudería Ligier de F1, que ya ganó un título hacía años, lo vio como una gran opción para volver a lo más alto. La compañía que ahora hace microcoches, tuvo discrepancias con Fiat en materia monetaria y como Alfa Romeo era propiedad de Fiat, 1 y 1 hacen 2. El motor cayó en manos de Alfa para su suculento proyecto.
La Fórmula S era la meta y ya tenían lo más importante. Ahora necesitaban todo lo demás. Para ello y, gracias a Fiat de nuevo, lograron que el fabricante Brabham les proporcionase un chasis perfectamente encuadrado para la bestia. Veamos a continuación los números que me permiten la licencia de llamarle bestia.
Alfa Romeo 164 ProCar, especificaciones y fin
Chasis monocasco de fibra de carbono con subchasis tubular de aluminio, carrocería de fibra de carbono que podía desacoplarse por completo, neumáticos slicks anchísimos y un «aleroncito» que casi parece nimio teniendo en cuenta los siguientes datos declarados.
Con un peso de 750kg en conjunto, el V10 montado en posición central trasera desataba los 620cv para acelerar de 0 a 100km/h en solo 2,1 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 329km/h. Encima dijeron que con unos neumáticos mejores podría haber ido mejor durante el test que hicieron durante el GP de Monza.
Tanto el equipo como los que presenciaron la prueba quedaron extasiados. Sin embargo, con la economía global atrofiándose, la futura Fórmula S terminó siendo cancelada, no sin la angustia de lo que se iba a perder el mundo entero. Pero no lo veamos como algo negativo, porque al fin y al cabo, la emblemática Alfa Romeo pudo demostrar su buen hacer en materia de competición, dando pie a otros éxitos como el logrado en la DTM, que como vemos en su museo, no fue el primero.