El coche eléctrico es una realidad hoy, pero cada vez lo será más. Sin embargo nos hemos acostumbrado a entender al eléctrico siempre vinculado a unas baterías y un enchufe, y esto no tiene porque ser así. La pila de combustible de Hidrógeno es la gran alternativa al eléctrico a baterías, y por esta razón hoy te traemos la prueba en vídeo del nuevo Toyota Mirai para descubrir si el Hidrógeno es una alternativa real, y cuáles son las ventajas e inconvenientes de la pila de combustible.
La pila de combustible de Hidrógeno lleva años en los planes de desarrollo y experimentación de muchos fabricantes de coches, sin embargo solo dos firmas son las que de verdad lo están apostando todo para llevar a cabo una producción en masa. Una de estas firmas sería Hyundai, y la otra es Toyota que ya va por la segunda generación de su coche de pila de combustible de Hidrógeno, el Toyota Mirai.
Toyota Mirai
Aprovechando el lanzamiento de esta segunda generación del Mirai, en Diariomotor nos propusimos crear un vídeo con el que darte a conocer todos los entresijos de esta tecnología, así como sus principales virtudes e inconvenientes. El potencial de esta tecnología es grande, y es que a modo de resumen rápido, promete autonomías superiores a los 600 Km, repostajes de Hidrógeno de 5 minutos y nulas emisiones tanto a nivel local (solo emite agua), como global (siempre y cuando el Hidrógeno se genere con energía renovable).
El objetivo de Toyota con el nuevo Mirai es dar el salto de escaparate tecnológico a vehículo de representación, tanto en diseño como en calidad o tecnología, aunque sobre todo en refinamiento durante la conducción. Hablamos por lo tanto del nuevo buque insignia de la marca, su coche más avanzado y más cuidado, un Mirai precio de partida es de 65.000 euros.
Tales son las pretensiones de Toyota con respecto al nuevo Mirai, que los objetivos de la marca hablan de vender 30.000 unidades al año, poniendo el foco principalmente en mercados como USA o Japón, países donde la infraestructura de repostaje de Hidrógeno está mucho más extendida. En Europa Alemania es el país de referencia con 80 Hidrolineras o Hidrogeneras en funcionamiento, mientras que en España solo existen 4 estaciones para repostar Hidrógeno, aunque todas ellas de acceso privado.
Tras probarlo durante una breve toma de contacto por los alrededores de Madrid, de lo que estoy seguro es de que el Toyota Mirai cumple a la perfección con todo cuanto se espera de un coche eléctrico, y eso que en materia de prestaciones (con 182 CV de potencia máxima) está muy lejos de las cifras que ofrecen rivales como el Tesla Model S o el Porsche Taycan. Sin embargo, a cambio saca a relucir las bondades de la pila de combustible en cuanto a autonomía y facilidad en el respotaje. Por lo tanto, la guerra entre ambas tecnologías se presenta igual de reñida, si bien en ambos casos el mayor escollo lo encontramos en la escasa infraestructura.
Dicho esto, a día de hoy parece que el eléctrico a baterías cuenta con cierta ventaja frente al Hidrógeno, y es esta receta es la que más apoyo está recibiendo por parte de todos los fabricantes de coches, mientras tanto el Hidrógeno cuenta con bastante menos apoyo como demuestra la oferta comercial liderada por Hyundai y Toyota. Sin embargo, tampoco podemos pasar por alto el hecho de que más allá de los turismos ligeros, la pila de combustible de Hidrógeno cuenta con cada vez más interés, pues se postula como la mejor solución para impulsar vehículos de gran tamaño y peso como camiones, trenes, barcos o incluso aviones. En esos casos donde ya se está trabajando en alternativas eléctricas, las baterías presentan el gran incoveniente de la baja densidad energética que aún ofrecen, además de los eternos tiempos de recarga que obligaría un eléctrico para semejantes usos.