No todo vale para vender un coche. Y eso debería saberlo cualquier anunciante. Las redes sociales están que echan humo estos días, y todo por un anuncio de Audi en China en el que han tenido una idea tan desafortunada como comparar a una mujer con un coche usado, precisamente para promocionar el mercado de seminuevos de Audi en China. Cuando una marca de renombre lanza una campaña publicitaria lo último que quiere es que esta se vuelva en su contra, y al parecer eso es lo que ha sucedido con lo que debería haber sido un inofensivo anuncio y, por desgracia, ha acabado ofendiendo a mucha gente.
No parece que la brecha cultural entre Europa o Estados Unidos y China sea suficiente para justificar este anuncio. De hecho todo el revuelo se inició precisamente en China y en redes sociales como Weibo, desde las que muchos internautas solicitaron la inmediata retirada del anuncio. Ver noticia en South China Morning Post.
Audi, por su parte, niega cualquier responsabilidad en la acción, en tanto esta depende de los equipos de marketing en China, que a su vez dependen de la joint-venture FAW-Audi y FAW-Volkswagen. La acción habría sido contratada con la agencia Ogilvy China.
El anuncio que ha causado la polémica, cuyo vídeo puedes ver más arriba, nos presenta la escena de una boda, y como la madre del novio chequea a la novia para comprobar que está en condiciones para casarse con su hijo.
Desde Automotive News apuntan que este no es el único anuncio ofensivo, aunque sí el que más revuelo ha generado, y el único que hemos podido ver. Un segundo anuncio precisamente atacaría al novio de una pareja, en una escena en la que su pareja lo enfrentaría a un detector de mentiras para comprobar si de verdad la quiere.
En cualquier caso, tampoco se trata de discutir sobre qué anuncio es más ofensivo. La publicidad ha de ir mucho más allá de lo que sea o no legal, e incluso acotar los límites del humor, puesto que a fin de cuentas buena parte del éxito de una campaña tiene que ver con la imagen, los estereotipos y la filosofía que una marca quiere transmitir. Y estamos convencidos de que Audi lo último que quería era comparar a la novia con un coche usado.
De hecho Audi se ha caracterizado precisamente por transmitir una imagen completamente diferente en otros anuncios publicitarios, como este de la Superbowl en Estados Unidos, en el que lejos de hablarnos de sus productos centraron la atención en la igualdad, mostrando su compromiso con la igualdad de salarios entre sus trabajadores y sus trabajadoras.
Mucho más cerca, en España, también hemos visto cómo Audi centraba sus acciones publicitarias en la pasada campaña navideña con un anuncio que pretendía romper los roles de género y los estereotipos en los juguetes que en estas fiestas se regalan a los más pequeños.
Y es que, insistimos, la publicidad no tiene absolutamente nada que ver con ser, o no ser políticamente correctos. Tampoco tiene que ver con el humor. La publicidad es esencialmente la imagen que quieres transmitir de una marca, y estamos convencidos de que cuando los colegas alemanes, españoles, o estadounidenses de Audi hayan visto este anuncio, más de uno se habrá echado las manos a la cabeza.