Ya han pasado suficientes años desde que surgieran los primeros rumores al respecto del posible lanzamiento del coche de Apple como para plantearnos que el proyecto, de haber existido, hubiera sido cancelado. Pero hoy mismo surgía una nueva noticia, que apunta a nuevos refuerzos en Apple, destinados específicamente al proyecto de un futuro coche eléctrico y autónomo, que según esa misma noticia debería ver la luz en 2025.
Bloomberg publica que, según fuentes conocedoras en la materia, Apple ha fichado a Desi Ujkashevic, hasta ahora en la dirección del departamento de ingeniería de seguridad de Ford, empresa para la cual ha trabajado en los últimos 31 años.
Y que su destino sería el proyecto de Apple para lanzar un coche eléctrico y autónomo.
La visión de Bosch del futuro autónomo y conectado del automóvil.
Un refuerzo para el proyecto de coche de Apple
Tal y como figura en el propio portal de Ford, Ujkashevic ha sido la responsable de todos los programas de seguridad de la marca, presentes y futuros, lo cual incluye el desarrollo de vehículo autónomo.
En el pasado, también ha ostentado responsabilidad en departamentos de ingeniería destinados a alcanzar mejoras de calidad, costes, beneficios y plazos y en productos como el Ford Escape, Explorer, Focus, Fiesta y los modelos Lincoln MKC y Aviator.
Según Bloomberg, Apple mantendría vivo el proyecto de su automóvil y recomponiendo su equipo con el objetivo de que vea la luz en 2025.
¿Tiene sentido que Apple se implique en el desarrollo de un automóvil?
Hasta hace poco, podía resultar como mínimo sorprendente que una marca como Apple se implique en un proyecto tan complejo, y tan alejado de su negocio, como es el desarrollo y fabricación de un automóvil. Pero la evolución que ha vivido la industria en los últimos años no hace otra cosa que recordarnos cuán equivocados podíamos estar los más escépticos. Tesla no solo ha demostrado cómo puede salir adelante, satisfactoriamente, el proyecto de una marca recién llegada a la industria del automóvil, compitiendo con fabricantes centenarios, sino también la oportunidad que brinda la profunda transformación que está viviendo esta industria a las tecnológicas.
El coche eléctrico y, sobre todo, el coche autónomo, está cambiando muchos paradigmas que regían en la industria del automóvil, hasta el punto en que los semiconductores y, sobre todo, el software, sean cruciales para sacar adelante proyectos tan ambiciosos como el lanzamiento de vehículos capaces de desplazarse sin la intervención de un conductor.
De hecho, en los últimos años estamos contemplando cómo los grandes de la industria, como Volkswagen, o Stellantis, han reformulado su estrategia alrededor del software, convirtiéndolo en el centro de su negocio y de su producto, y tratando de hacer que empresas con una estructura tradicional se parezcan cada vez más a tecnológicas como Google, Apple, Microsoft o, por qué no decirlo, Tesla.
