Astón Martin está dando vida a uno de los deportivos más espectaculares de esta era del automovilismo, una sofisticada bestia bautizada como Aston Martin Valkyrie que va a elevar el listón de lo que entendemos por hiperdeportivo y que llega para plantarle cara, sin sonrojarse, al todopoderoso Mercedes-AMG One, equipado con un motor de Fórmula 1. En el camino su peregrinaje hasta la producción Aston Martin ha sacado a la calle al Aston Martin Valkyrie.
El Aston Martin Valkyrie tiene un motor V12 de 1.000 CV
Ya matriculado, engarzando en su aerodinámica carrocería las placas británicas de su matrícula, el Aston Martin Valkyrie ha salido a rodar ataviado con una carrocería en azul oscuro por los alrededores del circuito de pruebas de la compañía, en Silverstone, dejándonos así con una nueva excusa para hablar de este nuevo superdeportivo.
Y es que cualquier excusa es buena para hablar de un coche que estéticamente y técnicamente parece tener más de prototipo de Le Mans que de coche de producción, desarrollado conjuntamente entre Aston Martin y Red Bull Advanced Technologies para poner sobre la mesa una espectacular relación peso / potencia, a la altura de su imagen y del arsenal de soluciones que recoge su chasis y carrocería.
Sólo se fabricarán 150 unidades del Aston Martin Valkyrie
Recordemos que el Aston Martin Valkyrie cuenta con un motor V12 de 6.5 litros de cubicaje, atmosférico y que desarrolla una potencia de 1.000 CV, una mecánica que se une a un propulsor eléctrico de 160 CV, con un par de 740 Nm y de 280 Nm respectivamente, un cohete híbrido capaz de girar a 11.200 rpm, se dice pronto y que sólo arroja sobre la báscula un peso de 1.000 kg.
Sólo se construirán 150 unidades y el objetivo de Aston Martin es conseguir que el Valkyrie complete una vuelta tan raído como un Fórmula 1 en Silverstone.