En el Salón del Automóvil de Shanghái, Audi dio a conocer el Audi A6 Sportback e-tron, un concept que, casi un año después, cede el testigo a la carrocería más familiar de la casa alemana: el Audi A6 Avant e-tron concept nos adelanta cómo será el próximo integrante de la gama liderada por el Audi A6. Un prototipo que va más allá ya que anticipa cómo será el diseño de los futuros coches eléctricos de la marca.
Hablar de Avant en Audi es hacerlo de sus modelos más familiares: el Audi A6 Avant e-tron no es ninguna excepción ya que la arquitectura empleada (Plataforma Eléctrica Premium, PPE) no sólo está diseñada específicamente para vehículos eléctricos, también está pensada para aquellos conductores que necesitan (mucho) espacio para sus acompañantes y (mucha) capacidad de carga.
Audi A6 Avant
El Audi A6 Avant e-tron concept les responde con unas medidas de 4,96 metros de largo, 1,96 metros de ancho y 1,44 metros de alto: las mismas cifras que los modelos actuales de las gamas Audi A6 y Audi A7. Tras estos números se reconoce una evolución coherente del lenguaje formal de la marca con líneas suaves que unen las superficies convexas y cóncavas de toda la carrocería.
Faros con sorpresa
Comenzamos el repaso al diseño exterior del Audi A6 Avant e-tron concept, ese que nos da pistas de cómo será el futuro de los cuatro aros, por el frontal donde no tardaremos en reconocer un rasgo característico: la parrilla Singleframe cerrada y delimitada en su parte inferior por unas marcadas tomas de aire para la refrigeración del tren motriz, la batería y los frenos. Los biseles planos de los faros se prolongan lateralmente subrayando la horizontalidad de la carrocería.
Los faros delanteros lucen planos y estilizados mientras se integran en la línea de la carrocería. Cuentan con tecnologías tanto Matrix LED digital como OLED digital… y guardan una sorpresa: más allá de la personalización, sirven como proyectores cuando el coche está aparcado frente a una pared para que los ocupantes, por ejemplo, se entretengan con un videojuego sobre una superficie mayor que la de la pantalla interior. Los grupos ópticos traseros dibujan una tira continua de luz con arquitectura tridimensional con la que también podemos crear firmas luminosas.
Rasgos Avant
En el perfil del Audi A6 Avant e-tron concept la atención se centran en los pasos de rueda que acentúan la anchura de la carrocería y, al mismo tiempo, se integran de forma natural: bajo ellos aparecen unas llantas de 22 pulgadas. En la parte inferior destaca, asimismo, una inserción de color negro que demarca la posición de la batería. Si seguimos el arco ligero que dibuja el techo llegaremos hasta el Pilar D cuya inclinación da lugar a las características ventanillas de los modelos Avant.
Llegamos, así, a la zaga donde se reúnen varias formas con una trabajada aerodinámica pensando siempre en el carácter eléctrico de este familiar. Mientras el alerón trasero con embellecedores en color acentúa visualmente la silueta, las dos salidas de aire del difusor trasero se integran en el paragolpes para cumplir su misión: canalizar el flujo de aire por debajo del vehículo para reducir las turbulencias.
Mucho espacio interior
Al tratarse de un concept, no se ha revelado el interior del Audi A6 Avant e-tron aunque sí conocemos algunos detalles que se desprenden de esa plataforma PPE: al tener una batalla tan larga, el habitáculo es más amplio y el espacio para las piernas es mayor en ambas filas.
Antes de subir a este familiar, sus ocupantes se encontrarán con un mensaje de bienvenida en forma de efectos luminosos dinámicos reflejados por tres proyectores LED en el suelo. Un sistema que sirve, también, para mostrar símbolos de advertencia con los que avisar a un ciclista o peatón de que una puerta está a punto de abrirse.
El motor del Audi A6 Avant e-tron concept
El Audi A6 Avant e-tron concept está impulsado por dos motores eléctricos que, en conjunto, desarrollan una potencia de 350 kW y un par de 800 Nm. Cuenta con suspensión neumática y amortiguación adaptativa: las ruedas delanteras se conectan al chasis a través de una suspensión de cinco brazos optimizada especialmente para vehículos eléctricos con un eje multibrazo en el tren posterior.
Para poder impulsarse, ese motor necesita energía y la encargada de proporcionársela es la batería de 100 kWh ubicada entre los dos ejes en una posición relativamente plana. Esta capacidad promete hasta 700 kilómetros de autonomía en función del sistema de propulsión y la potencia seleccionados: una cifra a la que también contribuye un coeficiente aerodinámico de 0.24 Cx.
Cuenta, igual que el Audi e-tron GT, con tecnología de 800 voltios que le permite cargas de hasta 270 kW: a este nivel necesita 10 minutos para almacenar la energía suficiente para recorrer más de 300 kilómetros y 25 minutos para pasar del 5 al 80% de su capacidad.
