Tres años después de que la compañía japonesa Takata, fabricante de airbag para la inmensa mayoría de las marcas de automoción, quebrase, aún sigue trayendo quebraderos de cabezas sus defectuosos productos. En esta ocasión le ha tocado a Audi, quien según el propio Ministerio de Consumo, realizará una llamada a revisión de los modelos afectados.
Actualmente hay 5 modelos afectados
Diversos vehículos de la firma de los cuatro aros equipados con airbag del conductor de la japonesa Takata con generador de gas NADI serán llamados a revisión, ya que poseen un defecto que impide que se inflen a tiempo o con la suficiente fuerza, lo cual puede provocar lesiones de diverso tipo en caso de accidente. En concreto, los modelos afectados son los A4, A6, A8 y Cabriolet fabricados desde 1997 hasta 2001, y el TT desde 1999 hasta 2001. Así, el airbag defectuoso será sustituido a media que se vayan fabricando los nuevos reeemplazos.
En concreto, esta información fue comunicada el pasado mes de agosto por Volkswagen España a las autoridades de consumo de Cataluña, quienes la remitieron hasta el Ministerio de Consumo, siendo posible consultar toda la información en la Red de Alertas de dicha cartera.
Takata quebró en 2017 ahogada por su airbags
Este caso no es nuevo, ni mucho menos un problema que sólo haya sufrido Audi o el Grupo Volkswagen, y es que la propia firma japonesa fabricante de airbags entró en quiebra en 2017 como consecuencia de ser incapaz de subsanar el problema de, al menos, 24 millones de airbags defectuosos sólo en Estados Unidos. Así pues, que se sepa, este defecto parece ser que ha costado la vida a unas 23 personas, haciendo que diversas marcas, como Acura, Honda, Toyota, BMW, Audi, Volkswagen, Mercedes, Ford, Jaguar-Land Rover… por no decir prácticamente todas, hayan realizado múltiples llamadas a revisión.
Recordemos que ese problema en el activador de los airbags de Takata radica en el empleo de nitrato de amonio como activador, una sustancia que se utiliza como explosivo controlado, pero con un fuente carácter oxidante. Así pues, ese carácter oxidante parece ser el responsable de haber debilitado varios componentes metálicos del conjunto del activador, de forma que tras saltar los airbags en un accidente se rompe en varios pedazos de forma descontrolada, impactando así contra los ocupantes a modo de metralla y causando graves lesiones.
Fuente: Ministerio de Consumo | Expansión
