Audi R8 GT y Lamborghini Huracán Tecnica. Palabras mayores. Estos dos superdeportivos están a punto de convertirse en un ‘rara avis’ porque sus motores no tardarán en despedirse de la combustión. Uno y otro comparten el mismo V10 atmosférico, pero sus cifras de potencia no son las mismas: ¿qué pasa entre el Audi R8 GT y el Lamborghini Huracán Tecnica?
Antes de responder, refresquemos nuestra memoria. El Audi R8 GT es la edición especial con la que Audi se despide de la segunda generación del Audi R8… y del V10. Un motor atmosférico central-trasero de 5.2 litros que entrega 620 CV de potencia a las ruedas traseras: un envío que lleva a cabo a través de una transmisión automática de doble embrague S tronic de siete velocidades.
Lamborghini Huracán EVO
El Lamborghini Huracán Tecnica, por su parte, esconde bajo su carrocería el mismo esquema técnico… aunque desarrolla 640 CV (igual que el Lamborghini Huracán STO): sí, hay una diferencia de 20 CV de potencia y, también, de sonido. Igual que en el superdeportivo alemán, esa fuerza llega al eje trasero gracias a una caja de cambios automática de doble embrague y siete relaciones.
20 CV de diferencia
La pregunta es inevitable: ¿por qué, teniendo el mismo motor, el Lamborghini es más potente que el Audi? No es cuestión de favoritismos, sino de normativas. Nils Fischer, Technical Project Manager del Audi R8, explicó a CarBuzz que la legislación que regula las emisiones en Europa les afecta de manera diferente por su volumen de producción: “Lamborghini, como pequeño fabricante, tiene diferentes reglas con las que jugar”.
La legislación europea sobre emisiones establece un umbral máximo que las marcas no pueden superar: si lo hacen, tendrían que enfrentarse a multas millonarias. No obstante, como toda buena norma, esta también cuenta con algunas excepciones. Aquellas marcas con un volumen de producción más bajo pueden pedir una exención para algunas de las regulaciones vigentes.
8.405 coches frente a 458.746
Así las cosas, los fabricantes que dan forma a menos de 10.000 unidades pueden, por ejemplo, establecer su propio umbral de emisiones: algo que, generalmente, hacen basándose en los niveles de años previos. En 2021, Lamborghini sólo produjo 8.405 vehículos, por lo que sí habría podido gozar de esa mayor flexibilidad.
De las líneas de Audi, sin embargo, salieron 458.746 coches y las emisiones de CO2 de toda esa flota debían respetar el máximo impuesto por la Unión Europea. Con ese límite, dar forma a un Audi R8 GT con las mismas especificaciones que el Lamborghini Huracán Tecnica tendría consecuencias: sería más complicado no superar el nivel asignado a la marca alemana.