Por todos es conocido el buen hacer del especialista alemán ABT encargado de llevar a otro nivel las diferentes creaciones del Grupo Volkswagen, aunque con la última de ella ha saltado literalmente todas la pantallas para llegar al final del juego. Se trata del Audi RSQ8 Signature Edition con una imagen que quita el hipo y 800 CV bajo el capó.
Para celebrar al 125 aniversario de la compañía, junto al Audi RS6 Johann ABT Signature Edition presentado el año pasado, los alemanes han construirán 96 unidades de este Q8 hipervitaminado, las cuales han conseguido vender en sólo cuatro días literales, lo cual no es casualidad, pues el modelo de Audi pertenece al segmento más exitoso del momento, el de los SUV, y es que independientemente de la marca de la que estemos hablando, son este tipo de vehículos los más vendidos. Prueba de ello es el Lamborghini Urus que no para de engrosar las cifras de ventas de la firma del toro.
Quizá, el SUV más rápido del momento con un 0 a 100 km/h en 3,2 segundos
Audi Q8
Pero centrémonos en este RSQ8 de ABT capaz de hacer el 0 a 100 km/h en 3,2 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 315 km/h fruto de los 800 CV de potencia y 1.000 Nm de par extraídos del V8 biturbo de 4 litros de cilindrada que originalmente se quedaba en “sólo” 600 CV. Por poner en contexto esas cifras, el mencionado Urus desarrolla 650 CV y necesita 3,6 segundos, mientras que un Bentley Bentayga W12 se queda en 635 CV y tanto un BMW X5 Competition como un Mercedes-AMG GLE 63 S emplean 3,8 segundos.
Para conseguir esas prestaciones no se ha recurrido a una simple reprogramación, sino que ABT ha desarrollado un intercooler y turbocompresor específicos para esta preparación, además de retocar convenientemente las diferentes ayudas electrónicas e instalar un sistema de escape de acero inoxidable con dos salidas dobles de 105 mm de diámetro para conseguir un sonido a la altura.
Todo al negro: ABT ha apostado por una combinación sobria a la par de elegante
En el plano estético se ha apostado un elegante negro sobre negro con múltiples detalles en fibra de carbono, tanto en el exterior como en el interior, además de incorporar un paquete aerodinámico que le confiere una imagen más agresiva y que añade elementos como nuevos faldones, tomas de aire o spoilers, sin olvidar las llantas forjadas de 23 pulgas con neumáticos en medida 295/35 tras las que se ocultan lo efectivos frenos cerámicos que ofrece Audi en opción y que pasan a ser obligatorios en este ABT. Asimismo, cabe mencionar que dichas mejoras en la carrocería no responden simplemente a cuestiones estéticas, sino que también han pasado por el túnel de viento para validar su efectividad.
Respecto al interior, también en color negro, vuelven a destacar las infinidades de inserciones en fibra de carbono (volante, consola central, estructura de los asientos…), así como el tapizado en cuero y nappa, además de los correspondientes logos bordados en los asientos y que también pueden encontrarse en los umbrales de las puertas o en los proyectores de bienvenida.