Bentley afirma que sus nuevos Continental GT son los gran turismo definitivos. No podemos estar más de acuerdo, especialmente tras probar una versión Coupé con doce cilindros hace apenas unos meses. Tras haber conocido a la nueva versión Convertible de los Bentley Continental GT, es hora de conocer a las versiones «de acceso» del GT británico. Decir versiones de acceso es casi una ofensa cuando estamos hablando de coches deportivos de lujo, misiles de Autobahn equipados con un motor 4.0 V8 biturbo de 550 CV de potencia, con precios que los alejan con firmeza del alcance del común de los mortales.
Bentley Continental GT
La principal novedad de los Bentley Continental GT V8 está en su mecánica. Es un motor 4.0 V8 sobrealimentado por dos turbocompresores – dos turbos twin-scroll, situados entre las dos bancadas de cilindros. Es esencialmente el mismo motor que encontramos en los Porsche Panamera Turbo y Porsche Cayenne Turbo, de hecho, no debemos olvidar que el Bentley Continental GT está construido sobre la misma plataforma modular MSB que el Porsche Panamera. Esta mecánica desarrolla 550 CV de potencia y un enorme par motor de 770 Nm, transmitidos a las cuatro ruedas a través de un sistema de tracción total inteligente.
Este sistema prioriza el reparto de potencia al tren trasero, y en condiciones de baja carga y buena adherencia es capaz de no enviar potencia al tren delantero. No obstante, cuando la situación lo demanda es capaz de variar en milisegundos el reparto de tracción, permitiendo que estos GT británicos tengan un gran comportamiento dinámico. Aunque sean coches grandes, pesados y lujosos, los Continental GT también son rápidos: hacen el 0 a 100 km/h en 4,0 segundos – 4,1 segundos si estamos hablando de un Bentley Continental GT Convertible – y tienen una velocidad máxima de 318 km/h.
Aunque Bentley no ha publicado sus cifras de consumo, afirman que son los Continental GT más eficientes, gracias a un sistema de desactivación de cilindros – en situaciones de baja carga, sus V8 son capaces de funcionar con solo cuatro cilindros. Tienen una autonomía superior a los 800 kilómetros, algo reseñable en coches de su potencia y prestaciones. En cuanto a diseño, son coches realmente muy similares a sus hermanos de 12 cilindros. Sólo unas llantas de 20 pulgadas de diseño específico y unos sutiles emblemas «V8» los diferencian, además del tono más bronco que emana de sus cuatro colas de escape.
De serie estos Bentley Continental GT V8 montan un equipo de sonido con 10 altavoces y 650 watios, faros LED matriciales, una suspensión de aire adaptativa y los mismos lujos que sus hermanos de doce cilindros – como puede ser la «bufanda» de aire caliente para el cuello de las versiones descapotables. Como siempre, el límite de la opulencia y sus posibilidades de personalización lo marca el tamaño de la chequera del cliente. Las primeras entregas tendrán lugar en Europa durante el primer trimestre del año que viene. Sus precios no han sido anunciados por el momento.