Lamborghini Countach, Miura, Lancia Stratos, Citroën XM, varios Alfa Romeo… todos estos modelos tienen algo en común: fueron concebidos por Bertone, los legendarios carroceros y diseñadores italianos que desaparecieron hace ocho años dejando un hueco irremplazable en el mundo del motor. Algo que ahora quieren remediar sus actuales dueños: Bertone vuelve y lo hace de la mano de un superdeportivo muy especial.
La prueba irrefutable la encontramos en las redes sociales de Bertone, donde, en las últimas semanas, anuncian ese esperado regreso. Y lo hacen con un nuevo modelo, mostrado (todavía) en penumbra. Un vehículo que “marca el inicio de una nueva era para el Bertone contemporáneo”. Esas publicaciones sugieren, además, que el diseño celebraría el 110º aniversario de la marca.
No podemos contar mucho sobre este deportivo porque las imágenes son escasas y el tráiler, disponible en la web de Bertone, es muy breve. Este “clásico instantáneo”, como lo define la propia casa, tiene la silueta de un superdeportivo (todos esperamos que con motor central) con un frontal corto y unos flancos traseros anchos en los que sí es posible reconocer las tomas de aire laterales. Las luces de la zaga recuerdan, ligeramente, al Alfa Romeo Carabo. Obviamente, no hay datos sobre el tren motriz del nuevo modelo de Bertone.
La historia de Bertone
Sus actuales dueños, los hermanos Ricci, cuentan que “al diseñar coches legendarios como el Lamborghini Miura, el Countach o el Alfa Romeo 1750 Coupé Bertone, la marca se ha ganado un lugar en los libros de historia del motor… que hoy están siendo desempolvados para dar paso a un nuevo y revolucionario capítulo”. Fundada en 1912 por Giovanni Bertone, su sede estaba en Turín.
Empezó siendo una empresa de transporte, pero en los años veinte su enfoque se centró en el diseño: Fiat y Lancia fueron sus primeros éxitos. Tras la Primera Guerra Mundial, la fama de Bertone se disparó trabajando con numerosas marcas italianas como Alfa Romeo, Ferrari y Lamborghini. Su trabajo, eso sí, no se limitó a Italia: Volvo y Citroën figuraban entre los muchos clientes de los carroceros y diseñadores turineses.
Ocaso y resurrección
Tras la Segunda Guerra Mundial, Nuccio Bertone (hijo del fundador) dividió la empresa en dos frentes: carroceros y diseñadores. El último modelo que la casa italiana diseñó bajo su propia firma fue el Bertone Nuccio en 2012: dos años después se declararon en quiebra y vendieron la marca a Akka Technologies poniendo, así, fin a más de un siglo de trabajo.
En 2020, Jean-Franck y Mauro Ricci, dos hermanos apasionados por el mundo del motor y conocedores del mismo, compraron Bertone para darle una segunda vida. Ahora preguntan cuál será el próximo modelo de ensueño de la firma, aunque habrá que esperar para tener una respuesta: por ahora, no hay fecha oficial para una presentación que significa el regreso de una icónica marca.