Tu padre es tu héroe. Y cada hijo ve a su padre como un héroe. Y así es, no hay padre mejor que otro. Salvo este. Partiendo de la bicicleta eléctrica de su hijo, con unas cajas de cartón, tiempo, y habilidad, ha construido un speeder inspirado en Star Wars que demuestra quién es el verdadero maestro Jedi.
Preparándose para la Comic-Con
La convención del cómic, conocida como Comic-Con, es uno de los eventos más importantes del mundo friki. Y este padre ya había diseñado unos trajes Jedi para que su hijo y él pudieran ir a la Comic-Con como maestro y padawan.
Sin embargo, el padre ha conseguido ir al siguiente nivel construyendo un Speeder como el que podemos ver en las películas de Star Wars.
Un Speeder sobre una bicicleta eléctrica
Como base ha utilizado la propia bicicleta eléctrica del niño. Y a esta ha añadido unos cuantos elementos, así como una grandísima dosis de ingenio. Ha utilizado cajas de cartón para crear la estructura similar a la de las motos deslizadoras de La Guerra de las Galaxias.
Con un poco de cinta americana ha conseguido unir todas las piezas y dar estructura al vehículo. Y con unos paneles reflectantes ha cubierto las ruedas, para que reflejando el suelo dé el aspecto de estar flotando en el aire.
Lo mejor de todo es que se ha gastado tan solo 40 dólares en todos los materiales, aunque no se puede negar que la dosis de ingenio y de habilidad ha quedado patente. Incluso el trabajo de pintura puede decirse que ha sido bastante destacable, con unos acabados muy profesionales.
Usando la misma «tecnología» que en las películas originales
Si bien es cierto que eso de poner paneles reflectantes para cubrir las ruedas para conseguir dar el efecto de flotación puede parecer algo rústico, la pura verdad es que esa es exactamente la misma «tecnología» que usaron en las películas originales de Star Wars, donde los efectos especiales consistían más en engañar a la cámara que en una gran potencia computacional.
El propio deslizador de Luke Skywalker con el que se desplazan con Obi-Wan Kenobi por Tatooine llevaba también paneles reflectantes para cubrir las ruedas, de forma que reflejara a la cámara la misma arena que habría detrás si realmente estuviera flotando.
El efecto funcionó, y aunque damos por sentado que cualquiera en la Comic-Con se dará cuenta de que la bici eléctrica no está flotando, también serán perfectamente capaces de reconocer quién debería recibir el premio a mejor padre del evento.
