El BMW 530e iPerformance es uno de los últimos lanzamientos enchufables de BMW. Se trata de una berlina híbrida de 252 CV de potencia combinada, extraídos de la combinación de un motor 2.0 turbo de 184 CV de potencia y un motor eléctrico de 95 CV. El motor eléctrico puede mover al coche por sí mismo, y de hecho, ofrece una autonomía completamente eléctrica de nada menos que 50 kilómetros – esta autonomía es posible gracias a una batería de iones de litio y 9,2 kWh de capacidad. Batería que próximamente podremos recargar de forma completamente inalámbrica, solo con situar nuestro coche encima del panel que aparece en la fotografía de portada.
La recarga inalámbrica de baterías no es un concepto nuevo, ni mucho menos. Se lleva utilizando desde hace años en el mundo de la electrónica de consumo y se ha popularizado en los últimos cinco años en multitud de smartphones – hasta el punto de que muchos vehículos son capaces de cargar de forma inalámbrica nuestros teléfonos móviles, siempre que sean compatibles con el estándar Qi. Pero ningún fabricante de coches había optado hasta la fecha por comercializar un sistema de recarga inalámbrica para sus eléctricos – aunque bien es cierto que muchos han coqueteado con la tecnología de forma experimental.
BMW Serie 5
El escollo de estos sistemas es que no son capaces de ofrecer una gran potencia de salida hasta la fecha. Además, someten a la batería a un esfuerzo considerable, patente en forma de un aumento notable de su temperatura interna. BMW ha recurrido a Qualcomm para desarrollar este cargador inalámrbrico. Qualcomm es una de las empresas más importantes del mundo en tecnologías de recarga, y es una de las principales empresas impulsoras de la Fórmula E, en la que BMW entrará próximamente de forma oficial. El cargador desarrollado por Qualcomm es un panel oscuro y muy plano, conectado a una toma de corriente de 220 voltios.
Sólo tenemos que colocar el coche encima de este panel, y será el coche quién nos guíe desde el equipo de infoentretenimiento y su cámara frontal. El panel genera un campo electromagnético, que es convertido en electricidad para la batería por la bobina de inducción situada en el coche. Con una potencia máxima de 3,2 kW, es capaz de recargar la batería del híbrido enchufable en aproximadamente 3 horas y media. Desde una aplicación de smartphone podemos controlar en todo momento el estado de la recarga. Este panel de recarga puede colocarse tanto en un garaje, como a la intemperie – una solución ideal para flotas electrificadas.
BMW aún no ha comunicado precios o disponibilidad de esta opción, pero su llegada al mercado promete ser inminente. Autocar informa que esta tecnología también será aplicada a otros vehículos eléctricos de BMW, siendo el BMW i8 un perfecto candidato, así como las versiones híbridas enchufables de los BMW Serie 2, BMW Serie 3 y BMW X5. En el vídeo situado sobre estas líneas podéis comprobar cómo funciona este sistema de recarga inalámbrica. Entre los retos de futuro de este tipo de soluciones está aumentar la potencia, reducir el coste de producción y crear un estándar de recarga inalámbrica para coches.
Fuente: Autocar