Las berlinas, un segmento que se ha visto involucrado en una despiadada lapidación por cortesía de los SUV, quienes atentan contra su presencia en el mercado desde prácticamente su llegada por allá a finales de los noventa. No obstante, marcas como BMW están dispuestas a nadar a contracorriente con retoños como el BMW Serie 5, modelo que, para más inri, cuenta en su abanico de opciones con el BMW M5 CS, variante más radical que aterriza en España con un precio de partida de 207.300 euros.
El departamento BMW M Sport ha sacado a relucir lo mejor de la berlina bávara exprimiendo hasta su último ápice de deportividad. Con esta premisa, nace un M5 que no solo es más exclusivo y caro, sino también más radical, eficaz y rápido, epítetos que adquiere de la mano de una puesta a punto mimada hasta el extremo.
Constancia de esto da su estética, donde una musculosa carrocería despeja toda duda sobre la condición del BMW M5 CS. Pasos de ruedas ensanchados, fibra de carbono por doquier, abruptas tomas de aire…Un sinfín de elementos que buscan contribuir no solo a asentar su estatus de berlina deportiva, sino también afianzar un comportamiento dinámico y una aerodinámica a la altura de las expectativas y del precio, por supuesto.
El habitáculo también juega un papel crucial en esta tarea al ofrecer una atmósfera en la que se respira deportividad desde el primer momento en el que accedemos a él. Los asientos son individuales incluso en la zona posterior, ofreciendo una sujeción lateral del talante de un vehículo como la berlina bávara; así también como numerosas inserciones en fibra de carbono, volante en Alcantara y elementos distintivos propios de una edición limitada como a la que está sometido el BMW M5 CS.
Pero el punto álgido recae, directamente, sobre su apartado mecánico. Aquí BMW ha puesto toda la carne en el asador al gestar al que es el BMW M5 más rápido y radical de todos los tiempos. Para alcanzar esta categoría ha sido necesario añadir a la receta un propulsor elevado a su máximo exponente, logrando así que el V8 biturbo de 4.4 litros erogue 635 CV y 750 Nm de par, cifras que permiten que salga catapultado hasta los 100 km/h en tan solo 3 segundos y que la velocidad punta sea de 305 km/h.
La fórmula del M5 CS no termina ahí ni mucho menos, gestándose con una reducción de peso de 70 kilos respecto al M5 convencional, con frenos carbocerámicos de serie, con neumáticos semi-slicks y con una reducción de la altura libre al suelo de 7 mm entre otros matices que buscan hacer sumamente única a esta variante de la berlina alemana, así como justificar los más de 200.000 euros que habrá que desembolsar si queremos uno.