El IIHS estadounidense es un organismo equivalente al EuroNCAP europeo. Es la máxima autoridad en crash-test y análisis de la seguridad de los coches al otro lado del charco. Ellos fueron los primeros en introducir pruebas de choque de gran exigencia, como el choque frontal de baja superposición – que sacó a relucir grandes carencias en la seguridad pasiva de muchos coches. En esta ocasión, han llevado a cabo una prueba exhaustiva de los sistemas de frenada de emergencia de once SUV superventas. Sólo uno de ellos ha suspendido el examen: el BMW X1. ¿Qué es lo que ha ocurrido?
BMW X1
El IIHS ha querido testar los sistemas de frenada de emergencia de los SUV más vendidos de EE.UU., concretamente su función de detección de peatones. En Estados Unidos casi 6.000 personas murieron en 2017 atropelladas accidentalmente por coches. La prueba es similar a la que lleva a cabo EuroNCAP en Europa, pero algo más completa: consiste en una frenada ante un dummy que camina en paralelo al coche por la carretera, una frenada ante un dummy del tamaño de un niño que cruza la carretera entre dos vehículos y una frenada ante un «adulto» que cruza la carretera. Las pruebas se llevan a cabo a velocidades de 20 km/h y 40 km/h en los dos últimos casos.
En el caso del adulto caminando por la carretera, se lleva a cabo a 40 km/h y 64 km/h. Un SUV con un buen sistema de detección de peatones debería evitar o mitigar en gran medida las colisiones en todas las situaciones. La prueba del niño es especialmente complicada para los sistemas de seguridad de coches: a 40 km/h el coche debe evitar el accidente en sólo 1,5 segundos, deteniéndose en menos de 20 metros. Estas pruebas serían difíciles de superar para un conductor humano, incluso para aquellos con buenos reflejos. Veamos cómo se han comportado los SUV en esta prueba.
Los mejor parados en esta prueba han sido los Honda CR-V, Subaru Forester, Toyota RAV4 y Volvo XC40, pero sólo los Toyota y Subaru fueron capaces de evitar completamente todos los impactos en las pruebas paralelas, las más exigentes. Además de estos cuatro líderes, el IIHS otorga una buena calificación a los Hyundai Kona, Chevrolet Equinox, KIA Sportage, Mazda CX-5 y Nissan Rogue (conocido como Nissan X-Trail a este lado del charco). Los problemas arrancan con el Mitsubishi Outlander, que apenas puntúa, ya que sólo reduce su velocidad de impacto con el dummy, y mínimamente en algunas de ellas.
Pero el peor parado ha sido el BMW X1, cuyo sistema no detectó al peatón circulando en paralelo al coche a 64 km/h, llevándoselo por delante sin frenar un ápice. En el resto de pruebas el SUV no redujo su velocidad de impacto, o lo hizo mínimamente. No obstante, estos resultados no son considerados desastrosos por parte del IIHS: este programa tiene como objetivo que los fabricantes mejoren sus sistemas de detección de peatones, sistemas que son por el momento opcionales.
Fuente: IIHS