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Un brindis en recuerdo del Salón de Ginebra

Desde sus inicios en 1905, el Salón del Automóvil de Ginebra había sido toda una referencia. En una zona neutral de Europa – algo muy importante especialmente cuando las guerras mundiales no eran tan lejanas en el tiempo – era el lugar en el que los fabricantes sacaban todo su arsenal de novedades, tanto coches nuevos como las tecnologías que incorporaban. Donde periodistas, mandamases del motor, ingenieros y muchos más protagonistas de este mundillo se daban cita. Algo que, como ya ha confirmado la organización, ha llegado a su fin tras la edición de este 2024. Al menos en Ginebra como tal, pues el salón que ellos mismos organizan en Catar sigue adelante.

El covid desencadenó una situación muy complicada para el Salón de Ginebra

Está claro que el covid-19 dio un golpe brutal a Ginebra, pues hasta 2019 aún gozaba de gran salud – es decir, presencia de la gran mayoría de marcas en sus stands. Recordamos en febrero de 2020 que se canceló a última hora, con algunas marcas ya habiendo realizado la inversión y preparación logística para estar allí. Los propios coletazos del covid hicieron que en los tres años siguientes no hubiera Salón de Ginebra y, para cuando volvió en 2024, la presencia de las marcas no tenía nada que ver con como era antaño, salvando lo que mostraron Renault, Fiat y algunas marcas de origen chino.

Dicho de otro modo, en ese tiempo, desde 2020 hasta hoy, las marcas han sabido pasar página ante la presencia de otros salones, como pueden ser el Salón de Múnich o el Salón de París, siendo el hogar de los dos principales grupos automovilísticos en Europa (Volkswagen y Stellantis). Ginebra, en estos años, ha perdido esa relevancia que mantuvo hasta antes de la pandemia.

Las nuevas tecnologías, además de la incertidumbre en el futuro del sector, también han sido factores a tener en cuenta

Audi Quattro Salon Ginebra 1980 01

La emergencia de China y el Salón de Pekín también ha tenido algo que ver, pues allí BYD, SAIC, Chery y las demás sacan todo su músculo al mismo tiempo que las marcas occidentales y japonesas tratan de no quedarse atrás. Estas, a su vez, tienen un escenario similar con roles invertidos en el Salón de Tokio.

A esto se suma el avance de las tecnologías y cómo se anuncian ante el mundo. Fiat mostró las novedades para el Salón de Ginebra a modo de teaser, pero en realidad lo que hizo fue demostrar que, como tal y con los medios actuales, los salones del automóvil no tienen la importancia para los fabricantes que tenían antaño. Ahora pueden interaccionar con sus clientes y consumidores a través de las redes sociales.

El Festival de Goodwood, un escaparate novedoso para los fabricantes

Eso sí, la posibilidad de poder preguntar cara a cara a directivos o ingenieros acerca de grandes novedades es un lujo que se da en salones de este tipo. También existe la posibilidad de que alguna marca permita este acercamiento con eventos propios, como han hecho Toyota, Kia o Polestar en tiempos recientes (Autocar).

Los salones tradicionales, por ahora, persisten, como es el caso de los citados. Ahora bien, existen nuevos modelos, algunos de ellos con mayor capacidad de ‘enganchar’ o llamar la atención. Un caso de esto lo hemos conocido desde hace más de tres décadas, pues cada verano se celebra el Festival de Goodwood donde se reúnen estrellas y coches de competición del ayer, hoy y mañana.

Es aquí donde las marcas están aprovechando para mostrar, tanto en puestos estáticos como rodando por la célebre colina junto a la mansión del Duque de Richmond, sus últimas novedades. En cualquier caso, tras más de un siglo de novedades, es hora de hacer un brindis por Ginebra.

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David Durán

David Durán desempeña la labor de redactor en el Equipo Editorial de Diariomotor.

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