Kevin Hart es un conocido cómico estadounidense. Lo que mucha gente desconoce es que Kevin Hart es un auténtico apasionado del motor, y concretamente, de los coches estadounidenses. El dinero no da la felicidad a no ser que te gusten los coches, y si es el caso, puedes permitirte que te construyan un restomod a medida de uno de los coches americanos más icónicos de los ochenta. Se trata del Buick Grand National, y este restomod es un homenaje a su versión GNX, que podríamos considerar uno de los muscle car más atípicos de la historia.
El GNX era una versión muy especial del Grand National, que destacaba por su motor 3.8 V6 sobrealimentado por un enorme turbo hasta los 276 CV. Se produjeron menos de 600 unidades en colaboración con ASC/McLaren Technologies, una filial de la McLaren británica fundada por el propio Bruce McLaren. El GNX era tan rápido como un Lamborghini Countach o un Ferrari 288 GTO, allá por el año 1987, y era más caro que un Chevrolet Corvette C4. Lo que Kevin Hart ha hecho es contratar a Salvaggio Designs para construir su propio homenaje al Buick GNX.
Lo sencillo hubiera sido emplear un motor V8 de alta potencia, pero para respetar la filosofía V6 de los Regal y los Grand National, el preparador ha usado el motor 3.6 LF4 V6 twin-turbo de un Cadillac ATS-V. Este motor desarrollaba originalmente 470 CV, pero el preparador ha eliminado uno de sus dos turbos y usado un turbo de mayor tamaño, además de modificar su electrónica y eliminar todos los componentes superfluos en busca de un look limpio. El motor desarrolla ahora 659 CV usando gasolina de competición de 103 octanos.
En un futuro, con nuevos árboles de levas y más modificaciones, el motor podría superar sin problema los 700 CV. La potencia pasa al suelo al tren trasero mediante un diferencial Tru Track de nueve pulgadas, y a través de un cambio automático de convertidor de par y ocho relaciones – el conocido y probado ZF. A nivel de plataforma, el coche está reforzado con soldadura TIG, una jaula antivuelco y refuerzos adicionales, además de usar una barra Panhard trasera y una suspensión delantera X-Gen 595 firmada por el especialista Detroit Speed & Engineering.
Por supuesto, los frenos también se han mejorado: ahora son unos Brembo con pinzas de seis pistones delante y cuatro detrás. El tren de rodaje también incluye unas espectaculares llantas HRE de aspecto vintage, con neumáticos Toyo en medidas 265/30 R19 delante y 325/30 R19 detrás. A nivel estético, este Buick con techo targa parece de serie, pero en verdad, presenta bastantes modificaciones. Todos los cromados son ahora de color negro y hay detalles en fibra de carbono en el capó, espejos retrovisores o alerón trasero.
Los tiradores de las puertas están rediseñados y el paragolpes delantero, modificado para lograr un mayor flujo de aire. El interior sí presenta más cambios, con un completo retapizado de salpicadero, puertas y molduras, así como la instalación de mayor apoyo lateral en los asientos. La instrumentación es digital y todo está construido con un gran mimo. Por cierto, el color bronce, usado en los pespuntes, aireadores y otros detalles, es un guiño al cinturón usado por Batman en sus películas.