La economía mundial tiembla: la sucesión de diversos eventos han hecho que la actividad comercial internacional se ralentice de forma sustancial. Todo va más lento, todo parece haberse frenado. Es algo que también le ha sucedido al petróleo, que tiene en la actualidad uno de los precios más bajos de los últimos años. ¿Se traducirá eso en una bajada del precio de la gasolina y del diésel? ¿Veremos precios por debajo del euro por litro?
En los últimos días el precio del barril de crudo Brent -el de referencia en Europa- ha visto como su precio saltaba por los aires, acumulando bajadas muy importantes. De hecho, el pasado 9 de marzo sufrió su caída más fuerte en los últimos 29 años, una caída que no se ha corregido en las últimas jornadas, manteniendo el precio del crudo a la baja. A día 11 de marzo, la cotización del barril Brent se sitúa en el entorno de los 36 dólares, uno de los precios más bajos de los últimos años.
Este precio es consecuencia de varios factores: uno es el impacto del coronavirus en la economía mundial, pero la guerra comercial entre los países productores de petróleo es aún más importante: la producción de barriles sigue disparada al no alcanzarse un acuerdo entre Rusia y la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo), de manera que la oferta de petróleo es mayor de la necesaria, «tirando» los precios. ¿En qué nos afecta a nosotros como ciudadanos?
¿Mejores precios en para el diésel y la gasolina?
Las estaciones de servicio ofrecen ahora diésel y gasolina más barata que la semana pasada, una tendencia que a buen seguro se va a mantener en las próximas semanas. ¿Podremos ver el precio por litro del diésel por debajo del euro? Es posible: si ésta guerra comercial se prolonga en el tiempo, es más que probable que el precio de la gasolina y del diésel desciendan significativamente, empujándolo por debajo del euro sobre todo en el caso de las estaciones de servicio low-cost.
En la actualidad el precio medio del combustible en nuestro país está fijado en 1.263€/litro para la gasolina de 95 octanos y en 1.151€/litro para el diésel estándar (gasóleo A). Es, por lo tanto, muy factible ver al diésel por debajo del euro/litro, siendo algo más difícil encontrar gasolina tan barata, aunque si la situación actual se dilata demasiado en el tiempo también podríamos llegar a verlo.
¿Qué pagamos cuando repostamos diésel y gasolina?
El precio del crudo es una parte importante en el precio final de los carburantes que repostamos, pero no es la única, ni siquiera es la de mayor peso. Los impuestos son los que tienen mayor proporción en el precio final del diésel y la gasolina: más del 50% del precio final corresponde a impuestos. Esto implica que la reducción del precio final en el precio del diésel y la gasolina no es tan grande como podríamos pensar a tenor del precio del petróleo, habida cuenta de que por mucho que baje el precio de la materia prima, el precio final seguirá estando fuertemente gravado con impuestos.
Así, al precio de la materia prima hay que sumar el del procesado -lógicamente-, el Impuesto Especial sobre Hidrocarburos (por cada litro de gasolina de 98 octanos se pagan 0,48€, por cada litro de gasolina de 95 octanos 0,45€ y por cada litro de gasóleo se abonan 0,36€) y el siempre presente Impuesto sobre el Valor Añadido, conocido por todos como IVA, que en el caso del diésel y la gasolina es del 21%.
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