La llegada del frío y las condiciones meteorológicas más inclementes, con motivo del otoño, marcan la llegada de una nueva campaña de control de la DGT. Un momento oportuno para vigilar los coches que circulan nuestras carreteras y asegurarse de su correcto mantenimiento, de garantizar el buen estado de los vehículos. Tráfico aumentará el número de efectivos que establecerán controles aleatorios en carretera para vigilar el estado de los vehículos, controles que no solo llevarán a cabo los agentes de tráfico de la Guardia Civil, sino también las policías autonómicas, y la policía municipal. ¿Pero en qué consisten estos controles?
Así te afecta la última campaña de la DGT
Las campañas de control de mantenimiento de la DGT se centran en la buena puesta a punto de todos los elementos de seguridad del coche. El primer objetivo, y el más obvio, será el de comprobar que los vehículos controlados circulan con la ITV en regla, puesto que son precisamente estas inspecciones las que garantizan que el coche cumple con las condiciones de circulación y que sus elementos de seguridad, y anticontaminación, funcionan correctamente.
Recordemos que circular sin la ITV supone 200 euros de multa, sin detracción de puntos.
La DGT redoblará esta semana sus efectivos, de agentes de tráfico de la Guardia Civil y las policías locales y autonómicas, que realizarán controles aleatorios para vigilar el mantenimiento de los coches.
Los controles que llevará a cabo la DGT estos días, en una campaña que se extenderá entre el 11 y el 17 de noviembre, también conllevarán una inspección visual de algunos elementos del coche. Los elementos más susceptibles a esta inspección serán, sin duda, los neumáticos, los faros y en su conjunto los elementos de iluminación y señalización, y el parabrisas, o incluso la placa de matrícula.
Por tu seguridad, y por el hecho de que estos días vayan a existir bastantes controles aleatorios que lo vigilarán, recomendamos que te asegures de que los neumáticos de tu coche no están demasiado desgastados, que los faros funcionan correctamente, que el parabrisas no está roto, o incluso que la placa de matrícula se ve correctamente. Recordemos que todos estos defectos son considerados infracciones y que, por lo tanto, podría costarnos una multa. En los casos más graves previstos por la DGT, como circular sin permiso, o deficiencias muy graves, la infracción puede suponer incluso la inmovilización del vehículo.
También recomendamos revisar que llevamos en nuestro coche el permiso de circulación y la tarjeta de la ITV, con la correspondiente pegatina, bien visible en la luna delantera.
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