La Dirección General de Tráfico iniciaba estos días su campaña especial de vigilancia y control, enfocada sobre todo a la mayor afluencia de tráfico que experimentarán las carreteras españolas con motivo de las vacaciones. Recordemos que las prioridades de la DGT para la campaña veraniega, como el resto del año, serán poner cerco a las distracciones, especialmente al uso del móvil, empleando incluso furgonetas camufladas, controlar con mayores medios las carreteras convencionales y proteger a colectivos como el de los motoristas y los ciclistas. Ahora bien, la DGT lleva a cabo una nueva campaña estos días que, con más radares, intentará vigilar que se respetan los límites de velocidad.
La nueva campaña de la DGT: más radares y más control de la velocidad
La nueva campaña de la DGT, dedicada al control de la velocidad, tendrá lugar entre el 6 y el 12 de julio. Durante estos días, la velocidad será el objetivo principal de los controles de los agentes de Tráfico que trabajan en las carreteras españolas, y especialmente durante el próximo fin de semana, que con motivo de los desplazamientos de largo recorrido de las vacaciones será el momento en que exista una mayor intensidad del tráfico.
La DGT decía hoy mismo en sus redes sociales que su objetivo no es ni «cazar», ni «pillar», ni multar al conductor, sino conseguir que este «adecúe la velocidad a los límites y circunstancias de la vía». La DGT también apuntaba a un dato importante, que en uno de cada cuatro accidentes mortales haya intervenido el factor de la velocidad inadecuada. La DGT persigue el objetivo, aún más complicado si cabe que la propia concienciación en seguridad vial, de desvincular sus campañas del afán recaudatorio que presumen algunos conductores de sus labores de vigilancia.
¿Qué medios empleará la DGT para controlar la velocidad?
La Dirección General de Tráfico dispone de 1.312 radares, contando con 764 radares fijos, de los cuales 80 de ellos son de tramo. En los últimos años hemos visto cómo se instalaban nuevos radares, priorizando sobre todo su posicionamiento en carreteras convencionales y el empleo de radares de tramo que, según Pere Navarro, al mando de la DGT, son más eficaces para asegurarse de que los conductores evitan exceder la velocidad máxima de la vía y evitar los frenazos al aproximarse al radar fijo.
La DGT dispone también de 548 radares móviles, presentes en coches camuflados, pero también instalados en guardarraíles y trípodes. Estos días también se ha hablado de las 15 furgonetas camufladas que está empleando la DGT, pero su objetivo no son los excesos de velocidad, sino controlar a los conductores que utilizan el móvil mientras están al volante de su coche.
También hay 11 drones de la DGT en servicio, pero estos no disponen de cinemómetros con los cuales captar y sancionar excesos de velocidad. Si perseguirán los excesos de velocidad los 12 helicópteros con tecnología Pegasus que emplea la DGT.
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