Mucho se habla de la picaresca española, pero estas actividades no entienden de fronteras. En Estados Unidos también tienen carriles Bus-VAO con unas normas parecidas a las de España: uno de los requisitos para circular por ellos es el número de ocupantes que viajan en el vehículo. Y para llegar a ese mínimo, los conductores, a veces, dan rienda a su imaginación. En este caso han optado por un Grinch hinchable, que, obviamente, no cuenta como acompañante.
Como decíamos, en EEUU cuenta con sus propias vías destinadas a los vehículos de alta ocupación: se llaman carriles HOV porque esas siglas significan lo mismo en inglés, High Occupancy Vehicle. Nacieron, también, con el objetivo de reducir la congestión del tráfico y los niveles de contaminación y para poder circular por ellos, el conductor debe ir acompañado, como mínimo, por otro pasajero más.
Dos pasajeros, como mínimo
Igual que sucede en España, los carriles HOV suelen estar separados de los principales por barreras físicas y, dependiendo del estado, fuera de las horas punta, su circulación se puede habilitar únicamente a vehículos de emergencia, de obras o al transporte públicos. En Estados Unidos son muy populares y habituales porque, teniendo en cuenta las distancias y el tiempo que los conductores pasan en sus coches, son fundamentales para evitar los atascos.
Razón por la que más de uno ha intentado engañar las autoridades para circular por los carriles HOV cuando viajan solos. Al último infractor lo encontramos en Arizona: colocó un muñeco hinchable en el asiento del pasajero, pero no logró despistar a las autoridades. Básicamente, porque el improvisado acompañante era el Grinch, el duende verde creado por Theodor Seuss Geisel y famoso por querer acabar con la Navidad. Imaginamos que la elección tenía mucho que ver con la época del año en la que estamos.
Last week, an #AZTrooper spotted a driver in the high-occupancy vehicle (HOV) lane with a Seusspicious-looking "passenger" on I-10 at Avondale Blvd at 8AM.
The trooper stopped the driver & determined the grumpy green guy was, in fact, an inflatable Grinch. (No other passengers.) pic.twitter.com/YcOfZHJVoX— Dept. of Public Safety (@Arizona_DPS) December 13, 2022
El Grinch, un original copiloto
La policía estatal de Arizona se dio cuenta de que el copiloto no era humano, reconoció al personaje de ficción y dieron el alto al conductor. Este fue sancionado y el Departamento de Seguridad Pública de Arizona (DPS) decidió publicar un tweet con los hechos, que no tardaron en adquirir notoriedad en las redes sociales.
Lo cierto es que posibilidades de éxito de ese plan eran, prácticamente, inexistentes. El conductor podría haber engañado a otros usuarios de la vía e, incluso, a las cámaras de velocidad… pero no a los agentes. No es la primera persona que intenta engañar al sistema con pasajeros falsos como peluches, maniquíes, recortes de cartón o simples sudaderas puestas en el asiento, pero puede que sí sea uno de los intentos más divertidos hasta el momento.
En España es famosa la táctica del maniquí. A lo largo de los años, varios conductores han intentado eludir las normas de acceso al Bus-VAO de la A-6 con muñecos que ubicaban en los sistemas de retención infantil o con maniquís a los que vestían y complementaban para que parecieran personas reales. Cabe recordar que circular por estas vías con un vehículo no autorizado o incumpliendo la normativa está castigado con una multa de 200 euros sin pérdida de puntos en el carnet de conducir.