Cuando vas a comprar un coche de segunda mano, se puede pagar mucho más dinero de lo que, en realidad, vale el vehículo debido a una de las estafas más habituales… y menos reconocibles: la manipulación del número de kilómetros. Una mala praxis que no se da únicamente en España, está extendida por buena parte de los mercados: en Estados Unidos se ha convertido en un serio problema, ya que casi dos millones de modelos muestran un kilometraje falso.
Comencemos por España. CarVertical, una empresa especializar en informes sobre vehículos de segunda mano, desveló que en uno de cada diez coches de segunda mano han manipulado su cuentakilómetros: un 10,6% del mercado. En Europa, sin embargo, esta práctica está más extendida: representan un 15,2%. Eso sí, la picaresca no entiende de fronteras: hay casos más serios.
El caso de Estados Unidos
En Estados Unidos, según los datos del Departamento de Justicia, los modelos que sufren este fraude, de media, recortan 64.370 kilómetros en el odómetro. Es uno de los mayores fraudes que sufren los consumidores en el citado país: no en vano, existen abundantes tutoriales en YouTube que te explican cómo hacerlo con sistemas que están a la venta Amazon y eBay.
El último informe sobre el tema está firmado por CarFax, otro proveedor de historiales de vehículos: la principal conclusión de su investigación es que, en EEUU, más de 1,9 millones de coches circulan por la carretera con un número de kilómetros falso. Una cifra que supone un crecimiento del 7% con respecto a 2021. Debido a este fraude, los conductores pagan, de media, 4.000 dólares (3.700 euros) más al comprar un modelo con el odómetro ‘afeitado’.
Un fraude que cuesta 1.000 millones al año
El estado con mayor cantidad de vehículos manipulados en sus carreteras, es California (437.600) seguido por Carolina del Norte. En el ‘top 10’ nos encontramos, también, con Texas, Florida, Ohio, Nueva York, Illinois, Pensilvania, Georgia y Virginia. Algunos de ellos representan los mercados con más volumen del país.
Estos diez estados representan, por volumen, 1,2 de los 1,9 millones de vehículos manipulados a tenor de los datos facilitados por CarFax. Especialmente preocupante es el aumento vivido en Texas (15 %), Florida y Arizona (12%), Carolina del Norte (7%) o en Pensilvania e Illinois (5%). En California, Nueva York, Georgia y Virginia el incremento fue inferior al 5%. Haciendo las cuentas, de media, encontraríamos 17.000 coches con un odómetro falso en cada uno de los cuarenta estados restantes.
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés) no tiene datos actualizados sobre este fraude: hay que remontarse a los de 2002. En aquel momento, calcularon que, anualmente, se vendían 450.000 vehículos con el odómetro alterado. Y según el mismo organismo, es un fraude que “cuesta a los estadounidenses más de 1.000 millones de dólares (924 millones de euros) al año”.