Los datos del mercado chino, según ha recogido CPCA (China Passenger Car Association) muestran un hito importante en la transición del mercado. Los avances en electrificación han llevado a obtener cifras que quizás envidian algunos políticos de la Comisión Europea, con un gran volumen de ventas tanto de híbridos enchufables como de eléctricos, un avance con una aceleración increíble fijándose en cifras de años atrás.
La noche y el día entre Europa y China
En el caso de Europa ya lo hemos comentado en artículos anteriores: la media en Europa está bajando de manera considerable, situándose por debajo del 20% de la cuota total, siendo Noruega el único lugar en el Viejo Continente donde los eléctricos son la norma. Portugal ha logrado un porcentaje bastante elevado mientras que en España sigue estancado en el 10%, en Italia es aún menor y en Alemania los eléctricos han sufrido un descenso de casi el 40% en este mes de julio después del descenso de diciembre de 2023 provocado por el fin de los subsidios para coches eléctricos.
Pero es que en China, por primera vez, la suma de vehículos híbridos enchufables, eléctricos puros y eléctricos de autonomía extendida (lo que ellos llaman NEV, vehículos de nuevas energías) ha llegado al 50% de la cuota total de mercado, en concreto al 50,7%. En comparación, la suma de híbridos y eléctricos hace apenas tres años era de… el 7%. Las grandes inversiones del gobierno chino en esta tecnología ha dado lugar a esta situación (además la gran competitividad dentro del mismo mercado)
El crecimiento de estos vehículos en China se ha visto potenciado por un aumento en las ventas de eléctricos en junio, una tendencia que ha seguido en julio mientras que los híbridos enchufables y eléctricos le han ido comiendo terreno a los vehículos de energías tradicionales, como los convencionales de gasolina. En la capital, Pekín, se permitirán licencias para 20.000 nuevos vehículos eléctricos o híbridos enchufables, la primera vez que ocurre esto desde que en 2011 se limitara el número de vehículos para evitar atascos y que empeorase más la calidad del aire.
Aún así, es el cuarto mes consecutivo en China en el que decrecen las matriculaciones de vehículos, cayendo un 3,1% en este mes de julio. Esto ha llevado al gobierno chino a introducir nuevas ayudas de hasta 20.000 yuanes (unos 2.553 euros según el cambio de divisas actual) con efecto retroactivo hasta el pasado mes de abril (Reuters).