La movilidad urbana está asistiendo a la llegada de una solución que, si bien es cierto, ya existía desde el momento en que empezaron a popularizarse los microcoches, está recibiendo un nuevo impulso con una suerte de «coches» ultracompactos, ligeros, y urbanos, y con un motor eléctrico que permite su movilidad sin restricciones en las ciudades, independientemente de las Zonas de Bajas Emisiones.
Recientemente os hablábamos del Citroën AMI destacando que es más seguro que una scooter y que lo puedes conducir desde los 15 años. También recordábamos que no es un coche propiamente dicho, ni está homologado como tal y, por lo tanto, tampoco goza de la seguridad y las ayudas a la conducción y sistemas que sí están presentes en cualquier coche moderno.
Citroën Ami
Pero el potencial de este tipo de vehículos va mucho más allá. Por ejemplo, en la solución de movilidad que pueden ofrecer a muchos colectivos, incluidas las personas con movilidad reducida, que es precisamente lo que ha conseguido Citroën presentando un, de momento concept, de Citroën Ami adaptado.
Movilidad urbana… para todos
El Citroën Ami for All es un proyecto de vehículo adaptado desarrollado por Citroën con PIMAS, una empresa dedicada a adaptaciones de vehículos para personas con movilidad reducida.
En consecuencia, se han llevado a cabo las modificaciones necesarias para hacerle la vida más fácil a sus usuarios y, tal y como propone Citroën en su nota de prensa «devolver la autonomía a quienes la han perdido»:
- El habitáculo se ha revisado para que se pueda alojar una silla de ruedas de forma segura y cómoda, frente al acompañante, y facilitar la transferencia de esta.
- Fuera del habitáculo se ha instalado un soporte, de tipo baca, con cinchas, para llevar la silla de ruedas plegada en el exterior.
- Se han desplazado los mandos del acelerador y el freno a una palanca mecánica accesible a las manos, junto al volante.
- Se ha incrementado el ángulo de las puertas para facilitar el acceso.
Ni coche, ni scooter… cuadriciclo ligero
Respecto al Citroën Ami, recordar que es un cuadriciclo ligero, un vehículo urbano de cuatro ruedas con una longitud de solo 2,41 metros, permitiendo su aparcamiento en batería en una plaza de aparcamiento en línea lo suficientemente ancha. Es un vehículo eléctrico, con una potencia muy limitada de 5,4 kWh y una velocidad máxima limitada a 45 km/h, lo que impide su uso en el ámbito extraurbano y restringe su utilidad a la ciudad. Su autonomía, en consecuencia, también es muy ajustada, de 75 kilómetros.
Disponible desde 7.990 euros, el precio no es definitivamente su mejor argumento de compra, puesto que en ese rango de precios es posible encontrar coches urbanos propiamente dichos de segunda mano.
Pero, tal y como demuestra esta adaptación, sí que puede ser potencialmente una solución de movilidad perfecta ya no solo para menores, a partir de los 15 años, sino también para personas con movilidad reducida.