Para los fabricantes, comercializar coches de corte asequible en Europa ya no es algo tan fácil como lo solía ser años atrás. Una escalada en los costes de producción unido a un empobrecimiento del bolsillo medio europeo ha hecho que poner en el mercado nuevas generaciones este tipo de coches se convierta en un reto que sólo los mayores actores de este nicho pueden afrontar, pero de hacerse de manera correcta la recompensa está prácticamente garantizada.
Esta tesitura la demuestra a la perfección un modelo cuya anterior iteración ya no valía para su fabricante si el objetivo pasaba por poner en las calles un coche asequible pero competitivo en términos de prestaciones y tecnología. Hablamos del Citroën C3, que a tenor de los primeros resultados de la que es ya su cuarta generación, se ha moldeado de manera acertada.

Citroën C3 y ë-C3
Claves del Citroën C3
- Su versión más asequible parte desde 15.240 euros, aunque no trae pantalla para la radio, siquiera
- Está disponible con un motor de gasolina, uno microhíbrido y uno eléctrico
- Por sus medidas, se trata de un coche del segmento B, a pesar de las soluciones estéticas de SUV que luce
- Por su enfoque, su principal rival es el Dacia Sandero
Imágenes del Citroën C3






Y es que, en lugar de toma la anterior plataforma del C3 o la misma que los Peugeot 208, Opel Corsa y Lancia Ypsilon, lo que Stellantis determinó para el turismo más económico de la firma francesa, fue recurrir a una arquitectura pensada para mercados emergentes, realmente, más sencilla y con costes de producción inferiores que les permitiría poner en las calles un coche de precio más bajo.
El resultado de ello son sus 15.240 euros de partida, a los que también ayudan en gran medida, en realidad, fuertes recortes de equipamiento (su versión más sencilla prescinde, incluso, de pantalla para la radio), pero la realidad es que no deja de ser un coche, que es entre 2.500 y 3.000 euros más asequible que los Opel Corsa y Peugeot 208, que en lugar de articularse en torno a la plataforma Smart Car del C3, lo hacen sobre la CMP.
La estética de SUV del C3 le hace ganar puntos conforme a su competencia más directa, aunque realmente no lo sea.
¿Hay alguna desventaja evidente de la Smart Car frente a la CMP? Realmente, de momento, sólo en las versiones eléctricas hay una clara ventaja en cuanto a prestaciones, ya que es capaz de brindar mejores prestaciones. No obstante, aún tienen que salir a la luz los resultados de las pruebas de la Euro Ncap, que determinan la seguridad de cada turismo a la venta en Europa, un frente en el que puede haber sorpresas al estar basado en una plataforma que no deja de atender, principalmente, a las necesidades de mercados emergetnes, aunque haya recibido ajustes para adecuarse a las exigencias del mercado europeo, en última instancia. Esto también repercutiría en los nuevos Opel Frontera y Citroën C3 Aircross.
Sea como fuere, la realidad comercial de una apuesta como la conformada por el C3 es que en sus primeros compases a la venta, está resultando ser un auténtico éxito de ventas en Europa, donde en estos dos primeros meses del año ha conseguido posicionarse como el segundo coche más vendido de todo el continente, sólo por detrás del imparable Dacia Sandero, que sigue siendo el modelo de más éxito en todo el mercado.
En sus versiones más sencillas el equipamiento es muy escueto (imagen del más equipado).
Han sido, concretamente, 18.181 matriculaciones las que el francés ha cosechado en el mes de febrero, sumando un total de 33.968 en lo que va de 2025. Con respecto al Sandero, en el acumulado del año hay una diferencia exacta de 9.015 unidades, según los números de Automotive News Europe.
Estos datos, en realidad y para acabar, pueden variar en gran medida en lo que resta de año, tanto para uno como para el otro modelo, pero a favor del C3 es cierto que todavía le queda por explotar el factor de efecto dominó que genera que se empiecen a ver cada vez más unidades por las calles europeas, y que con ello se percate un mayor número potenciales compradores de que se trata de una alternativa que por precio está sólo un poco por encima del Sandero, sin tener la evidente imagen de un coche de enfoque low-cost.
Imágenes del Citroën C3





