A menudo se nos critica a los medios por nuestra visión centralista de cualquier asunto. A menudo con razón. Lo que sucede en Madrid tiene repercusión en España y, en menor medida, cada gran ciudad española tiene un peso específico por lo que en ella acontece. Y el caso de los diésel nos plantea un buen ejemplo. La crisis de los diésel ha atemorizado, y con razón, a muchos compradores que hasta ahora no hubieran planteado otra opción a la hora de comprar un coche nuevo o de ocasión. Ahora bien, pongámonos en un caso concreto y diría que relevante. Quiero un coche diésel y no vivo en Madrid, Barcelona, o una gran ciudad, ¿me afectarán las restricciones?
Las restricciones al diésel en las grandes ciudades
Las restricciones al diésel más importantes, de momento, son las que se están planteando, y legislando, en ciudades como Madrid y Barcelona. En estas ciudades ya existían algunas restricciones en ciertas zonas, que cada vez son más amplias. Por la actividad industrial y humana, no solo el tráfico rodado, en estas urbes existen algunos problemas de contaminación que implicarán restricciones al tráfico puntuales. De momento, los coches más afectados por estas restricciones, sin duda, serán los más antiguos, y especialmente los diésel más antiguos. Los más beneficiados, aquellos de cero emisiones, y clasificación ECO. Para entenderlo, lo mejor es leer nuestro artículo sobre las restricciones a la circulación en Madrid.
En este punto ya nos encontramos con una diferencia importante, entre adquirir un diésel nuevo y un diésel de segunda mano. Los segundos serán los que sufran en mayor medida las restricciones, por eso es tan importante ser conscientes de la etiqueta medioambiental del coche que vamos a adquirir, el año de matriculación y la normativa de emisiones para la cual fue homologado. Si adquirimos un diésel hemos de ser conscientes de ello y tratar de adquirir el que goce de una clasificación más «limpia» según el etiquetado instaurado por Tráfico.
En este caso el centralismo sí tiene sentido, en tanto en cuanto lo que suceda en Madrid o Barcelona podría trasladarse pronto a otras ciudades españolas. Y por otro lado, también hemos de ser conscientes de que los problemas de contaminación no solo afectan a la capital. Muchas otras ciudades españolas superan los límites establecidos de ciertos contaminantes. Ciudades como Valladolid también han tenido que implantar restricciones al tráfico. Las restricciones al tráfico, por lo tanto, no se limitarán a Madrid y Barcelona, pero estas sí serán las ciudades que más las sufran.
El valor de reventa del coche diésel
Incluso teniendo en cuenta que en ciudades más pequeñas pueda no haber restricciones, o ser muy puntuales, y que en el ámbito rural eso no vaya a ser un problema, lo que desconocemos en este punto es lo que puede suceder con el valor de reventa del coche diésel. He aquí el gran problema de la crisis que están viviendo los diésel, el de la incertidumbre. Las restricciones, y los problemas que desencadenó el escándalo de Volkswagen, están haciendo que los clientes huyan del diésel y a menudo por algunos temores infundados, también alimentados por nuestros gobernantes.
Que los diésel perderán valor en el mercado de ocasión según avancen las restricciones es un hecho, sobre todo si tenemos en cuenta la cantidad de operaciones de compra de coches que se llevan a cabo en las grandes ciudades. Y, de nuevo, los más afectados serán los diésel más antiguos. El único respiro que podría encontrar un diésel antiguo, anterior a 2006, sería que el Plan Renove propuesto para 2020 se centre en la renovación de estos coches, aunque hemos de recordar que aún no se han dado demasiados detalles al respecto. La devaluación de un diésel anterior a 2006 será enorme, pero al menos se beneficiarían de ciertas ventajas para ser achatarrados que compensen si el precio de adquisición del coche en el mercado de ocasión es bajo.
Por desgracia no existe una conclusión definitiva, y aún menos con la incertidumbre que se plantea en los próximos años. Pero sí algunos detalles que hemos de tener en cuenta si vamos a adquirir un coche diésel:
* Las restricciones del Tráfico no solo afectarán a Madrid y Barcelona, pero sí serán las ciudades españolas que más lo sufran
* Es importante adquirir un diésel que según el etiquetado de emisiones sea más limpio. Y esto resulta crucial en un coche de segunda mano. Los que más sufran las consecuencias de esta crisis del diésel serán los anteriores a 2006
* La depreciación que puedan sufrir los diésel, sobre todo los más antiguos, se sufrirá a nivel global, en toda España
* Si adquirimos un diésel, de ocasión, y antiguo pero muy barato, aún puede quedar el respiro de que en 2020 habrá un plan para su achatarramiento que ofrecerá algunas ventajas, aunque también requerirá para entonces la compra de un coche nuevo
