En Japón han establecido una alianza sin precedentes para salvar a los motores térmicos, un acuerdo a múltiples bandas cuyo principal estandarte es un nuevo propulsor 2.0 Turbo a gasolina capaz de alcanzar los 600 CV quemando gasolina sintética. Se trata de una pequeña bomba desarrollada por Toyota, una mecánica que no sólo promete estar en las calles en breve, sino que pretende convertirse en el mejor motor que jamás haya diseñado Toyota… y eso es decir mucho.
El 2.0 Turbo que salvará los motores gasolina según Toyota
En Toyota están trabajando en una nueva generación de propulsores gasolina, desarrollados desde cero y en solitario por ellos, que promete reinventar este tipo de mecánicas en términos de eficiencia, rendimiento y funcionamiento. El objetivo de Toyota con esta nueva familia de motores es poner en el mercado un nuevo tipo de propulsor modular y neutro en emisiones de carbono al poder quemar gasolina sintética o hidrógeno.
Son dos vías en las que está trabajando Toyota en este momento, ambas empleando configuraciones de cuatro cilindros, pero en un primer caso con una cilindrada de 1,5 litros para soportar un uso más convencional que prioriza la reducción de emisiones, mientras que por otro lado existe un 2.0 turboalimentado enfocado a aplicaciones más prestacionales, siendo capaz de alcanzar los 600 CV en su especificación más radical.
Sin embargo debemos tener en cuenta que no hablamos de simples prototipos, sino que Toyota ya ha presentado oficialmente estos motores, habiendo dado ya el salto a las pruebas en condiciones de conducción real gracias a su instalación en diferentes unidades de Lexus RC y Lexus IS. Además, estas mulas de pruebas que ya han sido cazadas en la vía pública, también cuentan con diferentes configuraciones del mismo motor 2.0 Turbo, pues mientras la versión más deportiva de 600 CV está siendo probada junto a una caja de cambios manual de 6 relaciones, una variante más “civilizada” de 400 CV está siendo evaluada junto a la transmisión automática DAT de 8 relaciones estrenada por el Toyota GR Yaris.
Los planes de Toyota para con esta nueva generación de propulsores de combustión interna, señalan 2026 como el año para su lanzamiento comercial, quedando aún por conocer qué modelos harán uso de estas mecánicas. Aún así, poco a poco veremos llegar estos nuevos motores a toda la gama de Toyota y Lexus, pues la clave tras estos propulsores es que han sido diseñados para comercializarse por muchos años, pudiendo sortear cualquier prohibición en materia de emisiones gracias a su compatibilidad con el uso de e-fuels e incluso hidrógeno en futuras evoluciones, además de sistemas híbridos para aportar una mayor eficiencia.
Y tan convencidos están en Japón de las posibilidades de su nuevo motor insignia, el 2.0 Turbo, que Toyota no duda en comparalo con el legendario motor 2JZ de 6 cilindros en línea empleado en el Supra, un motor sobradamente conocido por su exquisito funcionamiento, su robustez y su infinita capacidad para ser potenciado, de ahí que se haya convertido en una de las mecánicas más cotizadas para hacer «swaps».