Cupra sigue afianzando su despliegue comercial como marca independiente, presentada ya en el Salón de Ginebra bajo la nueva identidad, con un SEAT León ST Cupra R como colofón final bajo el emblema de SEAT y un nuevo Cupra Ateca como primer paso ya independizada, dejándonos entrever que la marca ahora independiente no sólo va a conllevar un nuevo logo en el frontal de los SEAT más deportivos, sino también una nueva comunicación, una nueva forma de acercarse a la comunidad de usuarios de coches deportivos de la marca de Martorell, un nuevo abanico de posibilidades que incluso abarca el mundo de las dos ruedas y es que lo último de Cupra no es un coche, ¡es una bicicleta!
La Cupra Fabike es una bicicleta urbana con cuadro de fibra de carbono
Cupra se ha unido con el fabricante de bicicletas Fabike para crear una bicicleta que, desarrollada sobre un cuadro de fibra de carbono, podremos comprar a finales de año en la red de concesionarios Cupra, con un precio aún no anunciado y con una importante labor por delante: la de darle más relevancia a la imagen de una nueva marca, una imagen muy criticada en su lanzamiento por lo particular de su logotipo.
Negra, atractiva, la bicicleta de Cupra es el primero de una serie de productos que la marca lanzará en los próximos meses para insuflarle fuerza a la comunidad de propietarios, de fans de la marca, algo que Abarth, en quien inevitablemente nos debemos fijar en este movimiento, también ha cuidado mucho desde que fue relanzada.
El Cupra Ateca es el primer coche de Cupra, con 300 CV
Recordemos que por ahora el primer modelo de producción de Cupra, como marca independiente, es el Cupra Ateca, con 300 caballos, tracción total, cambio DSG de 7 velocidades, una puesta a punto más deportiva y claro, una imagen acorde a su nueva condición, con una estampa más fiera, con unos paragolpes de corte más deportivo.
Tras el Cupra Ateca conoceremos, presumiblemente, a un Cupra Ibiza adelantado de manera conceptual y poco a poco el toque de Cupra se extenderá a más modelos, a más segmentos. ¿Conseguirá Cupra una identidad independiente tan firme como la de Abarth?