No todos los coches que se venden son comprados por particulares, ni todos ellos corresponden a las versiones de acceso de los mimos. A partir de ahí es fácil de entender porque Dacia es la cuarta marca más vendida a particulares en España y el Sandero el coche que triunfa entre ellos con una cuota de mercado del 7,3 %.
De hecho, y según informa la propia marca rumana, es el noveno año consecutivo en el que el Sandero es el coche más comprado por particulares, mientras que el Dacia Duster es tercer SUV compacto más cotizado en dicho canal. Pero, ¿por qué?
El low cost es una moda impuesta y que ha venido para quedarse
Dacia Sandero
No nos vamos a engañar, cualquiera de nosotros preferimos un Mercedes, un BMW o un Porsche a un Dacia, pero obviamente no todos podemos hacer frente a las tarifas de los alemanes, y es precisamente ese el motivo del éxito de Dacia entre los particulares: el mercado evoluciona a un ritmo diferente al poder adquisitivo. Vamos por partes.
De entrada, muy rara vez apostamos por la versión básica a la hora de comprar un coche, sino que nos vamos a una motorización intermedia medianamente interesante, un equipamiento más o menos completo y añadimos el color que más nos gusta. Ello se traduce en un considerable incremento respecto a esos precios gancho que vemos en televisión.
Sin embargo, Dacia parte de un precio base mucho menor a igualdad de segmento respecto a otras marcas generalistas como SEAT, Ford o la propia Renault, por ejemplo, de forma que es posible comprar un Dacia Sandero Stepway tope de gama por 15.000 € o un Dacia Duster también bastante completo por algo más de 18.000 €, y es precisamente en esos 18.000 € donde se establece el presupuesto medio que un español dedica a comprar un coche nuevo.
Además, esos Dacias, como ya te contamos en nuestra prueba del Duster o cuando hablábamos del efecto Dacia y las low cost, cuentan con una relación calidad-precio muy buena, que no con una buena calidad. Es decir, un SEAT Ibiza está mucho mejor resuelto que un Dacia Sandero, pero es que es mucho más caro.
Y volviendo a esa idea de que el mercado ha evolucionado a un ritmo distinto al poder adquisitivo, he aquí un par de apuntes. Según el INE (Instituto Nacional de Estadística), el salario neto anual más frecuente en 2009 era de 14.490 € anuales, mientras que en 2018 fue de 15.484 € (en 2019 fue menor, pero vamos a considerar el máximo desde el 2009), lo que significa un incremento del 7 %.
En cambio, un coche tan típico como un SEAT León 2.0 TDI 140 CV DSG costaba en esos años unos 22.650 €, mientras que el actual SEAT León con el propulsor análogo sube hasta los 28.180 € (hablamos de tarifas oficiales sin descuentos), lo que da lugar a un incremento del 24 %. No obstante, es cierto que este SEAT León es más grande, más seguro, más tecnológico… y más todo que aquel SEAT León ¿Moraleja? Quien antes compraba un León ahora compra un Duster dada la actual SUVmanía, y quien antes compraba un Ibiza ahora compra un Sandero. Esto tiene muchos matices, pero es una aproximación.
La electrificación, el principal enemigo de Dacia
Pero los tiempos cambian y el coche eléctrico como normalidad está a la vuelta de la esquina, y es precisamente este cambio el que puede hacer perder a Dacia su cómoda posición dominante entre los particulares, ya que a pesar de que los rumanos cuentan en el Spring con uno de los eléctricos más baratos del mercado, también es de los menos utilizables en cualquier escenario, mientras que marcas chinas como BYD, Aiways, MG o DFSK se están apresurando a cubrir ese nicho con productos muy prometedores, productos baratos y resolutivos.
De hecho, Dacia tampoco debería descuidarse con su actual gama de combustión, pues estas marcas de origen asiático saben que son precisamente esos modelos tradicionales la puerta de entrada a nuestros garajes y ya están comercializando híbridos enchufables y coches de gasolina tan interesantes y baratos como los de Dacia, siendo un claro exponente de ello el nuevo MG ZS de gasolina desde 15.950 € y sin nada que envidiar al Duster. ¿Comienza el crepúsculo de Dacia desde oriente? ¿Era de esperar el éxito de Dacia entre los particulares?