En sólo unas semanas descubriremos una interesante alternativa al Tesla Model S que nadie esperaba. Dispuesto a plantar cara a la visión más premium de la berlina eléctrica, esa donde también encontramos coches como el BMW i5 o el Mercedes EQE, hablamos de un coche que promete hasta 750 Km de autonomía y un diseño único en su clase.
El DS Nº8 apunta al Tesla Model S
La firma premium DS está a pocas semanas de presentar oficialmente el que está llamado a ser su coche más llamativo y rompedor. Dentro del grupo Stellantis, DS defiende una filosofía donde el lujo, el diseño y la tecnología son principales protagonistas, motivo por el cual su nuevo buque insignia pretende ser un escaparate rodante del potencial de la marca en estos tres aspectos.
Confirmado que su nombre será DS Nº8 estrenando así una nueva denominación comercial para sus modelos, lo nuevo de DS debemos entenderlo como una reinvención del planteamiento de la berlina tradicional, apostando por una estética cargada de personalidad y ángulos rectos, pero al mismo tiempo sumamente cuidada a nivel aerodinámico para conseguir un coeficiente Cx de apenas 0,24. El DS Nº8 apostará por detalles tan llamativos como la integración del maletero dentro de la cabina o una apariencia crossover con protecciones plásticas alrededor de su carrocería o una mayor altura libre al suelo.
Sin embargo hoy también podemos ver por primera vez cómo será el interior del DS Nº8. El fabricante ha descubierto cómo ha planteado el habitáculo de este nuevo buque insignia y lo cierto es que, al igual que pasa con el exterior, estamos ante un diseño completamente nuevo y alejado de lo visto hasta la fecha en DS.
Haciendo uso de un salpicadero muy envolvente y minimalista, nos encontramos con una suerte de moldura que abarca todo el ancho del coche, integrando sobre ella una enorme pantalla táctil central que hará las veces de sistema de infoentretenimiento, así como un cuadro de instrumentos digital provisto de un panel de tamaño más comedido. A destacar también el uso de un volante con cuatro radios dispuestos en «X», dando así vida a un peculiar planteamiento para el gobierno de la dirección.
Fruto de esa apuesta por el minimalismo, todas las trampillas de aireación se han integrado de tal forma que pasen desapercibidas, igual que los controles, que pasan a ser en su mayoría táctiles salvo algunas muy pocas funciones localizadas en la consola central o bajo el sistema multimedia. Para terminar, no podemos pasar por alto el diseño de la nueva consola central ubicada entre los pasajeros delanteros, un elemento que proyecta el reposabrazos hacia delante, integrando en él el control del sentido de la marcha y algunos mandos para la regulación del volumen o la interfaz central.