La DGT quiere limitar la velocidad a 30 km/h en todas las ciudades españolas, lo que convertiría a España en el primer país en llevar a cabo esta medida. Tal y como os hemos contado en los últimos meses, la velocidad limitada a 30 km/h en ciudad no afectaría a todas las calles, sino únicamente a vías de sentido y carril único. Según estimaciones de la Dirección General de Tráfico eso supondría alrededor de un 80% de las vías urbanas. En Madrid, que ya ha limitado la velocidad a 30 km/h, el consistorio estimó en un 85% de las vías afectadas. Ahora bien, ¿qué otras ciudades han limitado la velocidad a 30 km/h?
La DGT muestra las ciudades limitadas a 30 km/h
En España, los límites de velocidad de 30 km/h ya se han introducido en Pontevedra, Oviedo, Bilbao, Pamplona, Burgos, Soria, Salamanca, Zaragoza, Barcelona, Palma, Cuenca, Valencia, Sevilla, Cádiz, Córdoba, Málaga, Murcia, Las Palmas, y Madrid.
Como os decíamos, en el caso concreto de Madrid se estimó en un 85% las calles afectadas por esta medida y, por lo tanto, limitadas a 30 km/h. Actualmente, el límite general es de 50 km/h y, salvo en estos y otros casos concretos, existen límites de 30 km/h. A partir de ahora, y cuando se apruebe y entre en vigor la nueva normativa de la DGT, el límite general será de 30 km/h y los ayuntamientos decidirán si optan por un límite diferente en algunas vías.
El límite de 30 km/h en Europa
Uno de los objetivos de la DGT es propiciar la convivencia de vehículos, peatones y nuevos vehículos de movilidad personal, como los patinetes eléctricos.
En Europa, los límites de velocidad urbanos de 30 km/h ya están presentes en Dublín, Londres, París, Lyon, Bruselas, Milán, Roma, Viena, Berlín, Copenhage, Estocolmo, Helsinki y Łódź.
¿Por qué se limita a 30 km/h la velocidad en las ciudades?
Tráfico asegura que su objetivo es calmar el tráfico. No obstante, la razón principal para abogar por estos límites de velocidad es la seguridad. El 30% de los fallecidos en accidentes de tráfico se producen en las ciudades.
Otro de los objetivos de esta medida es regular y ordenar el uso de nuevos modelos de movilidad, como los vehículos de movilidad personal, y más concretamente los patinetes eléctricos. De hecho, el objetivo de la DGT es prohibir el uso de patinetes eléctricos por las aceras y facilitar que estos circulen, a una velocidad máxima de 25 km/h, en vías urbanas limitadas a 30 km/h.
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