La DGT ha aprovechado uno de sus últimos tuits para recordarnos que a partir de 2024 si compramos un coche nuevo tendrá que estar equipado de serie con el sistema de velocidad inteligente o ISA por sus siglas en inglés (Intelligence Speed Assistance), una obligatoriedad que se adelanta a todos los nuevos modelos homologados a partir de julio de este mismo año.
Con ello, el organismo dirigido por Pere Navarro pretende seguir disminuyendo la siniestralidad y mortalidad en nuestras carreteras, ya que es precisamente la velocidad inadecuada la tercera causa más frecuente de accidentes. No obstante, debemos recordar que esta norma no viene dictada por nuestro Ejecutivo, sino que viene directamente de Bruselas junto a un paquete de medidas que pretende poner en el mercado coches más seguros.
El ISA es desconectable y no limita la velocidad máxima de tu coche
Pero, ¿en qué consiste realmente este sistema de seguridad? Pues bien, al contrario de lo que creen algunos conductores, este dispositivo no limita la velocidad máxima sus coches de manera permanente como sí ha hecho por ejemplo Volvo restringiéndola electrónicamente a 180 km/h, sino que se trata de un sistema totalmente desconectable. Dicho lo cual, los límites en la vía pública son claros y con ello no queremos incitar a sobrepasarlos en ella.
Así pues, este sistema hace uso del reconocimiento de señales para poder leer los límites de velocidad en la vía en la que nos encontramos, así como del propio sistema GPS cuyos mapas suelen tener asociados dichos límites. Dicha información se traslada al control de crucero adaptativo (ACC) de forma que nunca sobrepasemos el límite de la vía, modificando así nuestra velocidad de forma automática.

En líneas generales, según comenta la propia DGT, los fabricantes hablan de un margen de error del 10 %, dándose esos errores en situaciones más complicadas como tramos en obras, vías paralelas muy juntas o con climatología adversa, de ahí que este sistema pueda ser desconectable para que sea el conductor quien tenga siempre la última palabra. No obstante, el objetivo es que a largo plazo (aún no se ha hablado de flechas ni plazos) es que siempre permanezca activo.
De hecho, tal es la importancia a día de hoy que en los test llevados a cabo por EuroNCAP el asistente de velocidad cuenta con un apartado propio que puntúa casi un 20 % del total de sistemas de seguridad. Así pues, mientras que un coche equipado con un sencillo limitador de velocidad puntúa con 1,3 puntos sobre 3, se requiere de estos sistemas más elaborados para poder aspirar al máximo.

El ISA no será el único ADAS obligatorio
Sin embargo, el ISA no será el único sistema de asistencia a la conducción obligatorio en 2024 (julio de 2022 para los nuevos modelos homologados), sino que tendrá que venir acompañado de los a continuación nombrados junto a una actualización de las mencionadas pruebas de choque EuroNCAP:
1. Frenada automática de emergencia
2. Sistemas de mantenimiento de carril
3. Detección de marcha atrás
4. Asistente inteligente de velocidad
5. Detector de fatiga y atención
6. Avisador de cinturón en plazas traseras
7. Sistemas de información del ángulo muerto
8. Control de la presión de neumáticos
9. Event Data Recorder
