La agitación política de los últimos años y la crisis que ha provocado la propagación del nuevo coronavirus han sido, y serán, una de las mayores amenazas para algunos de los planes que la Dirección General de Tráfico lleva tiempo queriendo implantar. El objetivo de la DGT pasa por limitar a 30 km/h la velocidad en buena parte de las calles de nuestras ciudades, no descartándose que en el futuro se pueda llegar incluso más lejos, limitando la velocidad en muchas calles a 20 km/h. Ahora bien, ¿qué planes tiene la DGT? ¿tiene sentido limitar la velocidad a 20 km/h?
La DGT nos habla de límites urbanos de 20 km/h
La DGT recordaba estos días cómo Bruselas está poniendo en marcha diferentes zonas 20, en las que la prioridad en la circulación es para los ciclistas y peatones. En estas zonas urbanas, los vehículos no pueden superar los 20 km/h. El límite de la velocidad viene como consecuencia de estudios que reflejarían que la probabilidad de supervivencia de un peatón, o un ciclista, en un atropello, sea superior al 90%.
Pero estos planes, que hasta ahora tenían como objetivo aumentar el espacio para ciclistas y peatones, y contribuir a una movilidad sostenible, adquieren un nuevo tinte con la crisis sanitaria que estamos sufriendo estos días.
El propio alcalde de Bruselas, Philippe Close, aseguraba al diario Le Soir que estas medidas pueden contribuir también al «distanciamiento social», recordando que en «áreas hipertensas con aceras muy estrechas, donde es difícil mantener una distancia social, esta es una forma de aliviar en el centro de la ciudad y evitar contagios».
Por otro lado, y ahora que nos encontramos en la denominada fase 0 de la desescalada en casi todas las ciudades españolas, la ordenación urbana, y la movilidad, han de adaptarse a un nuevo paradigma, en el que la movilidad en el transporte público se verá muy reducida para minimizar el riesgo de contagio, y los desplazamientos a pie, o incluso en bicicleta y vehículos de movilidad personal como los patinetes eléctricos, están llamados a ganar protagonismo.
En España, mientras tanto, no parece que se vaya a llegar tan lejos. El primer plan de la DGT pasa por instaurar un límite a 30 km/h en las ciudades en calles de carril único y de un carril por sentido, si bien es cierto que en alguna ocasión se ha hablado de límites aún más estrictos, también de 20 km/h. No obstante, y en la práctica, algunas ciudades españolas ya han instaurado límites 30 km/h, e incluso definido el ámbito de uso de bicicletas y patinetes eléctricos para utilizar estas vías que son más seguras para la movilidad personal.
