La DGT intensifica durante esta semana el control a los vehículos comerciales ligeros. Hasta el viernes la DGT realizará controles especiales a furgones y furgonetas a nivel nacional, centrándose especialmente en la velocidad, aunque también haciendo hincapié en el correcto estibado de la carga o la vigencia de la ITV. Además, en estos controles se harán pruebas de alcohol y drogas a los conductores de las mismas. Los furgones y las furgonetas son elementos clave en el movimiento de mercancías por carretera, y clave en el reparto diario en nuestras ciudades y polígonos industriales.
En la nota de prensa de la DGT se hace hincapié en que estos vehículos pueden conducirse con el mismo carnet B que cualquier coche. No obstante, son vehículos con características físicas diferentes, que motivan que su conducción sea bastante diferente a la de un turismo. Sin ir más lejos, suelen tener una M.M.A. (Masa Máxima Autorizada) de hasta 3.500 kilos, en el caso de los furgones más grandes. La carga que transportan debe estar correctamente sujeta en su interior, o en su caja, si esta es abierta. Una carga mal estibada puede incluso llegar a provocar vuelcos en casos extremos.
La carga más pesada debe situarse lo más cerca del centro de gravedad del vehículo, colocándola entre los dos ejes del vehículo. El correcto estibado de la carga será sujeto a revisión por parte de la Guardia Civil de Tráfico. Las furgonetas y furgones no llevan tacógrafos ni limitadores de velocidad, no pudiendo controlarse el número de horas que su conductor lleva al volante. Completamente cargadas, pueden ser hasta tres veces más pesadas que un turismo, estando sus componentes mecánicos sujetos a un mayor abuso. La vigencia de la ITV y el buen estado de los neumáticos serán también vigilados.
Por último, la DGT recuerda que los límites de velocidad de estos vehículos son inferiores. En vías extraurbanas los furgones no pueden viajar a velocidades de más de 90 km/h, y las furgonetas y mixtos adaptables no pueden superar los 100 km/h. En el primer caso, su velocidad máxima en nacionales con arcenes de metro y medio es de respectivamente 80 km/h y 90 km/h. Esta velocidad será controlada con radares móviles. Los controles de la DGT se centrarán en las carreteras convencionales, así como en polígonos industriales, zonas de carga y descarga y los aledaños de grandes superficies comerciales.
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