¿Recordáis cuando cierta política anunció que ‘al diésel le quedan dos días’? Aquellas declaraciones no eran más que un globo sonda, pero unidas a la llegada de las etiquetas ambientales y las ZBE, marcaron un claro declive comercial de los coches diésel en España. En un contexto más amplio, toda Europa está abandonando el diésel en turismos, en pos de la electrificación y pequeños motores de gasolina de alta eficiencia. Sin embargo, sería un error dar al diésel por muerto, y marcas como Renault lo tendrán muy presente en su futuro.
La noticia del día es que Renault ha firmado un acuerdo con PUNCH Torino, para el desarrollo de una nueva familia de motores diésel compatibles con las normativas Euro 6 y Euro 7. La normativa anticontaminación Euro 7 no fue anunciada hasta hace apenas unas semanas, y por fortuna, ha sido menos restrictiva de lo esperada dentro de su dureza. Esta normativa ambiental aun permitirá la existencia de motores de combustión interna – en lugar de ser una prohibición tácita – de gran refinamiento, estrechamente «controlados» por sistemas anticontaminación de vanguardia.
PUNCH es una empresa italiana especializada en el desarrollo de motores, y colaborar de forma técnica y humana con Renault en esta nueva familia de motores. Para la marca francesa esta operación – llamada «Horse Project» – amortiguará de forma considerable el coste de desarrollar motores de combustión interna. Por su parte, PUNCH podrá comprar, usar y vender estos motores en sus proyectos empresariales. Podría, por ejemplo, venderlos a un fabricante que ha decidido que invertir en el desarrollo de una familia de motores es demasiado costoso.
Los diésel Euro 6 y Euro 7 que Renault y PUNCH desarrollarán tienen como destino las futuras gamas de vehículos comerciales ligeros de Renault. No esperéis verlos en la gama de SUV de la marca gala, que en el segmento de turismos apuesta abiertamente por los híbridos y eléctricos. La producción de estos motores será llevada a cabo por Renault, y tendrá lugar de forma exclusiva en Cléon (Normandía, Francia). En la nota de prensa no hay referencia alguna a la fábrica de motores que Renault opera actualmente en Valladolid.
No obstante, este no debería ser un anuncio agorero para las instalaciones de Renault en España, que producen a buen ritmo las mecánicas híbridas E-Tech de coches como el Renault Captur o Renault Austral, entre otros. Esta noticia llega pocas semanas después de que Renault «trasladase» su negocio de vehículos de combustión interna a la joint-venture que ha creado recientemente con el gigante chino Geely.