Las RAM 1500 son tan americanas como el béisbol o la tarta de manzana. Hace unos años tuvimos la oportunidad de probar una 1500 Big Horn y nos dejó impresionados por sus enormes dimensiones, prestaciones y sensación de poderío a bordo. Podéis leer aquí la prueba de la RAM 1500. De cara a 2018, la RAM 1500 – uno de los productos estrella del Grupo FCA – se renueva en profundidad. Este lavado de cara trae consigo cambios estéticos, tecnológicos y técnicos. La pick-up más americana se renueva para seguir manteniendo su posición, luchando contra rivales tan formidables como las Ford F-150 y las Chevrolet Silverado.
En primer lugar, FCA ha rediseñado su frontal, que pierde los últimos vestigios de aquel «punto de mira» que caracterizaba los frontales de las RAM 1500. Tiene lógica: aquél era un código de estilo de Dodge, y las RAM 1500 ahora se venden bajo la marca RAM, junto a los vehículos comerciales del Grupo FCA. El frontal tiene un aspecto más duro, con el nombre de la marca en tamaño XXL y en posición central. En las versiones Limited y Laramie el frontal es un festival del cromado, con multitud de superficies resplandecientes, del más puro gusto texano – es la pick-up más popular en Texas, estado clave para RAM.
Además, este nuevo frontal mejora su aerodinámica, una asignatura pendiente del segmento. A las versiones de acceso y las versiones «de calle», se suman las RAM 1500 Rebel, que vuelven a ser relanzadas. Las Rebel son las 1500 más orientadas a un uso lúdico fuera del asfalto, sin llegar a tener un carácter tan radical como las Ford F-150 SVT Raptor. Técnicamente, hay grandes novedades en las RAM 1500. La primera es el uso de más acero de alta resistencia en su chasis, y la construcción de varias piezas de su carrocería – como el portón trasero – en aluminio. El ahorro de peso es el objetivo.
Las RAM 1500 de nuevo cuño son hasta 102 kilos más ligeras que el modelo saliente, y ello se traduce en mejores consumos. En cuanto a sus propulsores, una de sus grandes novedades es el estreno de un sistema llamado e-Torque, opcional en las RAM 1500 con motor HEMI V8, de serie en las equipadas con el Pentastar V6. Se trata de un sistema eléctrico de 48 voltios, con un alternador-generador que actúa como apoyo del motor térmico. Es un sistema semi-híbrido: recupera energía en frenadas y deceleraciones, que almacena en una pequeña batería. De forma puntual, apoya con hasta 175 Nm de par motor extra al motor térmico.
Además, actúa como motor de arranque a temperatura de servicio para el sistema Stop&Start, arrancando el motor de forma completamente suave y discreta – aún conservan un motor de arranque convencional para arranques a baja temperatura. Los motores 5.7 V8 HEMI siguen desarrollando 395 CV de potencia, mientras que los 3.6 V6 Pentastar se conforman con 306 CV. Siguen asociados a cajas de cambio automáticas ZF de convertidor de par y ocho relaciones. Aunque en la nota de prensa no aparece anunciada, se espera que las RAM 1500 sigan contando con una opción EcoDiesel en su gama de motores, en este caso sin sistema mild-hybrid.
En cuanto al resto de cambios, se centran en un interior rediseñado. O más bien, un nuevo equipo de infotainment Uconnect de última generación. En su versión más avanzada, posee una pantalla vertical de 12 pulgadas – el estilo Tesla empieza a imponerse en vehículos generalistas. Su pantalla es táctil, pero aún conserva grandes botones, ideados para ser usados con guantes – muchas RAM 1500 seguirán dedicadas a un uso profesional. El cambio automático sigue organizado en una ruleta, ahora rodeada de los controles del sistema de tracción integral.