El familiar deportivo, tal y como lo conocemos, es un concepto automovilístico relativamente reciente. Se originó en los años noventa, con los BMW M5 Touring y los Audi RS2 Avant, y ni siquiera Mercedes participó en dicha batalla hasta años después del lanzamiento del M5 más práctico. Han pasado más de 30 años desde entonces, pero nunca es tarde para disfrutar de un duelo de aceleración entre los mejores familiares deportivos alemanes de los años noventa… y una de las mejores berlinas deportivas de todos los tiempos.
El duelo en cuestión ha sido publicado por el canal de YouTube de Hagerty y es parte de la serie Cammisa Ultimate Drag Race Replay, en la que se llevan a cabo concienzudas carreras de aceleración entre iconos del automóvil. El primer contendiente es el BMW M5 Touring, concretamente en su evolución dotada con el motor 3.8 de seis cilindros en línea y 340 CV de potencia, mas potente que el 3.6 de 315 CV con el que fue lanzado en 1992. La caja de cambios de la unidad que participa en la carrera es manual.
Mercedes-Benz Mercedes Clase E
Otro de los contendientes es el icónico Audi RS2 Avant, lanzado al mercado en 1994. Es considerado uno de los mejores familiares deportivos de todos los tiempos, y fue desarrollado junto a Porsche, además de parcialmente producido en Zuffenhausen. Su motor era un 2.2 turbo de cinco cilindros en línea, con 315 CV de potencia y tracción total Quattro. Su cambio es manual, de cinco relaciones. Por su parte, Mercedes carecía de un familiar deportivo a la altura del BMW y el Audi, siendo el Mercedes E 320 W124 lo más potente en su gama.
Equipado con un motor atmosférico de 3,2 litros, seis cilindros en línea – con cambio manual dog-leg, dicho sea de paso – y 220 CV, no es rival para los M5 y RS2. Por ello, para la carrera han decidido que Mercedes participe con una berlina. Concretamente con el espectacular Mercedes 500E W124, cuyo motor V8 de 5,0 litros desarrolla 326 CV, transmitidos al suelo mediante un cambio automático de cuatro relaciones. Este coche también fue parcialmente ensamblado por Porsche en Zuffenhausen, pero el desarrollo fue 100% Mercedes.
La carrera de aceleración cuenta una historia diferente a la que los guarismos de los coches podrían dar a entender. En un cuarto de milla, el Audi RS2 Avant podría tener una gran ventaja gracias a la tracción total, pero el turbo lag y unas marchas muy cortas terminan por lastrar su rendimiento frente a los BMW y Mercedes. El Mercedes, con un cambio supuestamente «antediluviano», sorprende a propios y extraños, sacando 7,5 coches de distancia al BMW M5 Touring, que no consigue despegarse del Audi, pese a tener una potencia superior.
El Mercedes 500E domina la carrera de forma clara, y es tras la carrera, cuando Jason Cammisa y Randy Pobst optan por enfrentar al ganador – una de las mejores berlinas deportivas de los noventa – contra un deportivo actual: un sencillo Mazda MX-5 ND2, con motor 2.0 de 184 CV y cambio manual. A favor del Miata juega un peso mucho más contenido y una mejor tracción, pero no sin ciertas dificultades, el tanque alemán termina imponiéndose al Mazda en el cuarto de milla – aunque por menos margen del que cabría esperar.
Sí, los coches han evolucionado enormemente en tres décadas.