Las bicicletas eléctricas se han convertido en uno de los medios de transporte óptimos para la ciudad. Sin embargo, a veces su precio hace que uno se plantee si son la opción adecuada o si podría ser mejor pasar a un vehículo como una moto. No obstante, la Btwin E Fold 100 de Decathlon podría ser una gran compra en ese caso. Por 800 euros puede ser un medio de transporte motorizado ideal que, además, no requiere de carnet de conducir para su uso.
Una bicicleta eléctrica básica y barata, la E Fold 100 de Decathlon
La Btwin E Fold 100 de Decathlon no es una bicicleta que busque competir con los modelos más caros como la bici de Decathlon que parece inspirada en la Tesla Cybertruck, sino ofrecer una opción a los que quieren gastarse lo menos posible, pero no quieren comprar una bicicleta en una tienda china desconocida o de una marca poco confiable, a la vez que quieren un motor con el que poder desplazarse con más facilidad. Su precio de 800 euros hace que sea accesible como medio de transporte, y aun así ofrece casi todo lo que uno suele buscar cuando quiere una bici básica con la que desplazarse desde el punto A al punto B sin atravesar rutas complejas.
De hecho, está pensada 100% para la ciudad, para carriles bici, y para velocidades moderadas. Pero aporta asistencia de pedaleo gracias a su motor que hace que no sea necesario hacer grandes esfuerzos para llegar al trabajo, a la escuela, o para cruzar la ciudad. La autonomía de 20 kilómetros es suficiente para poder llegar al destino y volver o incluso para cargarla al llegar al lugar donde vamos, como la oficina. Como ocurre siempre, en función del nivel de asistencia la pedaleo tendremos más o menos autonomía. Aunque no hay que olvidar que es una bicicleta con pedales, y que incluso sin batería no nos deja tirados.
Un motor básico para rutas sencillas
La E Fold 100 de Decathlon se parece mucho al modelo sin motor eléctrico, aunque a esta se le ha agregado ese motor de 35 Nm que aporta el extra de empuje necesario para ayudarnos en los recorridos que realizamos.
No está pensada para grandes cuestas, sino más bien para rutas sencillas, por terrenos llanos o con falso llano, o para pequeños desniveles que ya solemos realizar en bicicleta, pero que ahora podremos realizar de una forma más sencilla. Si vas al trabajo en bicicleta, esta E Fold 100 es perfecta para llegar más tranquilo y sin tener que hacer grandes esfuerzos.
Ágil y plegable
Una de las características clave de la E Fold 100 es su agilidad. Decathlon tiene ya otra bici en un precio similar con motor, pero más orientada al MTB. Sin embargo, esta es más para urbanitas gracias a su comportamiento. Es pequeña, con un centro de gravedad muy bajo, y con unas ruedas de 20 pulgadas. Eso hace que podamos cambiar de dirección rápidamente, ir por la calzada si es necesario, y bajarnos para cruzar un paso de peatones, o para tomar un carril bici que se inicia a esa altura de la calle. Esas cosas que no se pueden realizar con una moto son posibles con la E Fold 100.
Pero además de ello, una característica que la hace destacar sobre otros modelos eléctricos es que sigue siendo una bicicleta plegable. No como para llevarla en una mochila, lógicamente, pero sí para poder guardarla en la oficina sin que moleste a nadie, o incluso para echarla al maletero del coche, o para cargar con ella en caso de que sea estrictamente necesario.
De hecho, será más fácil entrar con esta bicicleta plegada que con una patinete eléctrico a aquellos medios de transporte públicos donde ya están poniendo más restricciones, porque su aspecto es el mismo que el de una bici plegable normal.
Pesa algo menos de 20 kg. No es tan ligera como una bici de carbono sin motor, pero es un peso perfectamente aceptable para tener que levantarla si tenemos que moverla o guardarla en un lugar, o incluso si tenemos que cargar con ella algunos metros.
Completa y barata, por 800 euros
Y si todo eso no fuera suficiente, incorpora elementos básicos necesarios como el kit de luces, o el portaequipajes para poder llevar mochilas en la sección posterior o una cesta donde poder llevar la compra.
Por 800 euros, resulta casi imposible encontrar una bicicleta eléctrica plegable más asequible, y con la confianza de ser ofrecida por una marca y una tienda con un mínimo de calidad asegurado.
