Si hay un modelo actual que encarne a la perfección décadas de competición, de altas prestaciones y de exclusividad, es el superdeportivo de Ford, el Ford GT. La tercera edición de este modelo tras el original Ford GT40 y el Ford GT de principios de siglo ya es un éxito, pero la firma americana quiere ampliar aún más su aura con la llegada del Ford GT Carbon Series.
La llegada de la actual generación del Ford GT se produjo a mediados de 2016, cuando las primeras unidades de este modelo manufacturado en Canadá comenzaron a llegar a manos de sus dueños, y su éxito ha sido tal que la marca ha decidido ampliar dos años más su producción, por lo que en total la producción final rondará las 1.000 unidades, a razón de 250 unidades por año.
Sus cualidades son innegables: propulsado por un motor 3.5 V6 Ecoboost con dos turbos, sus 656 CV se transmiten al suelo a través de una caja de cambios de doble embrague y siete velocidades, haciendo que su velocidad máxima supere los 340 km/h. Por si fuera poco, el trabajo aerodinámico de su carrocería es impecable, haciendo que su paso por curva se pueda calificar, como mínimo, de endiablado.
El Ford GT Carbon Series apuesta, aún más, por la fibra de carbono
Ahora Ford ha decidido lanzar un modelo aún más especial del Ford GT. Se trata del Ford GT Carbon Series, una variante que se construirá a partir de ahora y hasta el final de la vida comercial del Ford GT, siempre en proporción 1 a 7. Esto significa que por cada siete Ford GT que abandonen la fábrica, uno de ellos será la versión Carbon Series.
Mecánicamente no hay ningún cambio, pero el Ford GT Carbon Series se distingue de sus hermanos gracias a una decoración específica que incluye, de serie, llantas de carbono y franjas de carbono vistas, estando además pintado únicamente en cuatro posibles colores: azul, rojo, naranja o gris.
Por su parte, en el interior encontraremos un ambiente aún más racing, con fibra de carbono visible en prácticamente cualquier rincón del habitáculo. Además, con el fin de rebajar peso, se han eliminado elementos como posavasos o un hueco para bultos tras el asiento del conductor. El resultado final son 18 kg menos para hacer del Ford GT Carbon Series el Ford GT de calle más ligero de la historia.
Fuente: Ford
