Los traficantes de sustancias ilegales se las ingenian de múltiples formas para conseguir introducir su mercancía en otros países. Traspasar una frontera puede convertirse, dependiendo del lugar del mundo en que nos encontremos, en una tarea un tanto compleja. La que separa México y Estados Unidos está en primera plana especialmente desde que llegó a la presidencia del país yankee Donald Trump, que no ha cesado en su empeño de querer levantar un muro entre ambos países para poner más difícil la inmigración a Estados Unidos, así como el tráfico de drogas.
Sin embargo, lo último se antoja difícil pues la argucia e imaginación de los traficantes para ingeniar nuevos métodos para introducir la droga parece no tener límite. ¿Lo último? Introducir los fardos de droga en coches nuevos, directamente desde la cadena de producción, que más tarde irán a parar a otro país de la forma menos sospechosa.
Es lo que ha sucedido con varios Ford Fusion fabricados en la factoría que Ford tiene en Hermosillo (Sonora, México), precisamente en un estado con el «honor» de ser una de las mayores puertas de entrada de droga hacia Estados Unidos. Según la DEA, fue en esta planta donde, al parecer, alguien colocó fardos de marihuana -de 14,5 kilos cada uno- en unas cuantas unidades de Ford Fusion. De forma semicircular y escondidos por parejas en el hueco de la rueda de repuesto, quince de los coches viajaron en tren hasta Ohio y otros dos acabaron en Pensilvania.
Entre el 7 y el 11 de julio, un concesionario de Youngstown (Ohio) fue descubriendo gradualmente el alijo. Tras ponerlo en conocimiento de las autoridades pertinentes, estas pusieron cifra al valor de la marihuana intervenida: hasta de 1 millón de dólares en el mercado negro.
Esta no es la primera vez que se ha intervenido droga escondida con este método. Entre febrero y marzo fue encontrada alrededor de media tonelada también en varios Ford Fusion de fabricación mexicana que viajaron en tren hasta Minnesota. En aquel momento, los informes apuntaron que El Chapo Guzmán podría haber estado involucrado en la operación, ya que su cártel controla un área que incluye la fábrica de Ford en Hermosillo.
En un comunicado, Ford ya ha dicho que está trabajando conjuntamente con el FBI y las autoridades de Aduanas para investigar quién introdujo la droga en los coches y quién era el destinatario.
Fuente: CNN vía CarScoops
Fotos: DEA
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