Toyota es el mayor fabricante de automóviles a nivel global y como tal ha de tener una cartera de productos que le permita cubrir las necesidades de todos y cada uno de los mercados en los que actúa de manera efectiva. Si en Europa disfruta de cada vez un mayor protagonismo a nivel comercial por sus coches híbridos, lo cierto es que en otras partes del mundo tiene una gran reputación por ofrecer coches de precio bajo y capacidades mecánicas destacables, con especial buen desempeño en el apartado de la fiabilidad.
En este sentido, se puede decir que en muchas partes del mundo actúa como una marca low-cost como las que empiezan a tener cada vez mayor peso en Europa. Y es que, con Dacia protagonizando una evolución que prácticamente no tiene precedentes en Europa y marcas de enfoque asequible como MG asentándose entre las más relevantes en el plano comercial de nuestro país, muchas son las que ya han tomado nota y se han puesto a trabajar para lanzar modelos más escuetos en cuanto a pretensiones para venderlos a precios más bajos y ganar volumen de ventas.
Dentro de este contexto, el Toyota Urban Cruiser que el fabricante japonés tiene a la venta en otros mercados del mundo, bien podría cosechar una buena cuota de matriculaciones en Europa, pues se trata de un producto sencillo de enfoque económico, aspecto rudo y buenas capacidades prácticas. A pesar de su nombre, nada tiene que ver con aquella suerte de monovolumen y SUV que la marca tuvo a la venta en España a principios de Siglo.
Claves del Toyota Urban Cruiser
- Es un todocamino barato enfocado a uso mixto entre ciudad y fuera de asfalto
- Tiene mecánicas puras de gasolina a híbridas
- Mide 4,3 metros, por lo que es similar a un Dacia Duster
- Está diseñado para mercados emergentes
Más que un todoterreno, por los números de su ficha técnica y como su propio nombre revela, el Toyota Urban Cruiser es un modelo cuyo concepto cuadra más con el de un todocamino, pues sigue teniendo más capacidades fuera de asfalto que cualquier SUV de similar tamaño hoy día, sin dejar de lado que durante la mayor parte del tiempo sobre el asfalto.
A pesar de que por su altura libre al suelo y proporciones pueda parecer un todoterreno de cierto tamaño, la verdad es que mide sólo 4,3 metros, por lo que tiene una longitud inferior a la de un Dacia Duster o un Seat Ateca, que miden 4,32 y 4,36 metros, respectivamente.
Mecánicamente el Toyota Urban Cruiser es un coche sencillo. Su variante más vendida tiene un motor de 1,5 litros de capacidad que no tiene ningún tipo de asistencia por parte de un turbo o eléctrica. Rinde 105 CV y está disponible con una caja automática que dependiendo del mercado puede ser de cuatro o seis velocidades, así como con una manual de 5 relaciones.
Según la división sudafricana de Toyota, con este motor logra un consumo de 6,1 litros cada 100 kilómetros. También existe una versión impulsada por el mismo esquema híbrido que tiene cabida en el Toyota Yaris Cross que sí se comercializa en España, aunque esta versión se comercializa en mercados algo más avanzados.
Que el Toyota Urban Cruiser representa un producto de enfoque económico, es algo que queda patente en su precio. Está a la venta, por ejemplo, en Sudáfrica con un precio que al cambio en el momento de redactar estas líneas supone unos 16.500 euros.