Elon Musk acaba de presentar el primer túnel de The Boring Company. En 2016 nacía The Boring Company, algo así como un cajón de sastre en el que Elon Musk quería desarrollar diferentes proyectos, aunque el principal tiene que ver con excavar túneles en las ciudades y, sobre todo, utilizarlos para lanzar coches por ellos a velocidades de hasta 240 km/h, para vencer a la congestión del tráfico y, sobre todo, optimizar el tiempo empleado en los trayectos urbanos. Ya podemos ver cómo Elon Musk quiere lanzar coches en túneles a 240 km/h. Su primer túnel, que ha sido excavado en California, ya ha sido completado. Y el objetivo ahora es convencernos de que esta idea, que a priori podría parecernos descabellada, tiene sentido y, sobre todo, es viable.
Lanzar coches en túneles a 240 km/h
En su última presentación, Elon Musk ha mostrado cómo el proyecto de The Boring Company ha evolucionado. Si hasta ahora los desplazamientos en el túnel se basaban en colocar nuestro coche sobre una plataforma que viajaba por raíles a lo largo del túnel, la última iteración del proyecto ha evolucionado a un sistema que conecta el coche a los raíles, y que hace que sea este, el propio coche, el que tenga que moverse a lo largo del túnel.
Esta modificación ya implica importantes requisitos técnicos en el coche y, sobre todo, limita mucho el número de coches que podrán utilizar los túneles de The Boring Company. Como ya te habrás imaginado, los coches de Tesla sí serán compatibles con este sistema de transporte urbano.
La idea que ha concebido The Boring Company pasa por instalar un dispositivo junto a las ruedas que despliega un sistema que conecta el coche a los raíles. Según Elon Musk, este sistema podría instalarse en cualquier coche por no más de 300 euros. Ahora bien, los coches que utilicen los túneles de The Boring Company deberían ser eléctricos, mantener velocidades constantes alrededor de las 150 mph (más de 240 km/h) y tener capacidad autónoma, al menos para acelerar y frenar sin intervención del conductor.
La idea es crear redes de túneles bajo las ciudades que conecten diferentes puntos de la urbe, y a los que se pueda acceder desde un ascensor muy compacto, que apenas ocupe espacio en superficie. De hecho, la entrada al primer túnel excavado en California se ha instalado en un garaje de un edificio de la compañía SpaceX.
En el vídeo superior, publicado por la web Electrek, podemos hacernos una ligera idea de la sensación que tendríamos utilizando este sistema de transporte.
Las dudas al respecto del proyecto de The Boring Company son muchas. Dudas que parten de lo más básico, como la viabilidad del proyecto, que pasa necesariamente por optimizar el proceso de construcción túneles. Y dudas que van hasta cuestiones tan importantes como la seguridad.
Ya sabemos que The Boring Company no solo quiere prestar un servicio de transporte rápido a aquellos que se desplacen en coche, sino también incorporar una suerte de coches compartidos para todo aquel que quiera desplazarse entre dos puntos de la ciudad conectados por estos túneles con rapidez, y sin sufrir la congestión del tráfico en superficie.