A principios de la década de los noventa, aún con la llegada del estallido de la burbuja inmobiliaria que causó una tremenda crisis en Japón, cada coche que sacaban debía ser mirado con lupa. Muchos de ellos resultaron ser maravillas tecnológicas, muy buenos y elegantes Gran Turismo o icónicos deportivos…algunos de ellos, todo a la vez. Una de esas maravillas fue el Mazda Eunos Cosmo JC, particular por ser el único modelo en toda la historia (algo que parece que seguirá siendo así) con un rotativo de tres rotores disponible para el mercado.
El Eunos Cosmo era un GT elegante, aunque pueda parecer discreto hoy día
- Primer coche con navegador GPS en el mundo con su sistema CCS
- Equipaba controles táctiles de radio y climatización en 1990
- Varios niveles de acabado, el Type-E más lujoso y el Type-S más deportivo
- Dos motores rotativos, el 13B que incorporaría el RX-7 FD3S y el 20B de tres rotores
- Más de 300 CV, sin limitador de velocidad llegaba a 250 km/h sin problemas
El legado del Eunos Cosmo viene del Mazda Cosmo Sport, el primer deportivo producido en serie con motor rotativo, seguido por el Cosmo/RX-5 y el Cosmo con el motor 12B rotativo turboalimentado que llegó a ser el coche japonés de producción más rápido allá por 1982. Para finales de la década Honda tenía a Acura, Toyota creaba Lexus, Nissan a Infiniti y Mazda, que no quería ser menos, creaba Eunos, así como Efini, Amati para EEUU y Autozam. El Cosmo de cuarta generación sería, por tanto, Eunos y no Mazda.
De entrada, el logo de Eunos destacaba por no ser el de Mazda – en esencia, el diseño de un motor rotativo alterado. Era un GT elegante de dos puertas con líneas muy limpias, morro muy largo, pilotos delanteros y traseros muy delgados, en contraste con su enorme pilar C (que se notaba sobre todo en la luminosidad de las plazas traseras). Como ocurría con otros modelos japoneses de la época, tenía carrocería bitono con la parte inferior de otro color.
Ahora bien, por dentro la percepción del coche cambia por completo. El salpicadero sigue siendo futurista y moderno incluso 35 años después de su concepción, con un panel de instrumentos retroiluminado que era, en esencia, una enorme pieza que continuaba y fluía hacia la consola central, la palanca de cambios (caja de cambios automática de 4 marchas) y los detalles de madera italiana.
Pero hay que pararse en la consola central dado que era, para el momento, una ópera magna. Equipaba el primer navegador GPS del mundo en un coche de producción, controlándose la radio y el climatizador con una pantalla táctil. De manera adicional podía equipar tanto un teléfono móvil como un receptor para ver la televisión. Pero es que estamos hablando de un GT de 1990. Este Car Communication System no lo llevaban todos los Cosmo, de modo que en su lugar podemos ver unos controles más ‘mundanos’ que se podían ocultar con una cortinilla.
El Eunos Cosmo tenía dos motores, el mismo 13B del RX-7 FD3S y el 20B, el único coche de calle con tres rotores
El Eunos Cosmo sólo tenía dos motores, los dos rotativos. El primero les sonará a muchos entusiastas JDM dado que es el 13B-REW, el mismo propulsor de dos rotores que después montaría el RX-7 FD3S, la generación definitiva del rotativo deportivo por excelencia que sigue pareciendo una obra de arte tres décadas después. Ahora bien, su motor icónico era el 20B-REW de tres rotores y ‘280’ CV, la cifra tope tras el acuerdo de caballeros entre marcas japonesas. En realidad superaba los 300 CV de potencia. Mazda, así como Mercedes, había experimentado con motores de tres rotores, pero nunca había llegado al público hasta entonces.
Se trataba también de un motor biturbo, con un turbo pequeño soplando a bajas y medias vueltas y un turbo más grande activándose para la parte alta del cuentarrevoluciones, suavizando la entrega de par y eliminando buena parte del turbo lag aún común en aquellos años. Al quitar el limitador de velocidad, el Eunos Cosmo no tenía problemas en circular a 250 kilómetros por hora sin esforzarse más de la cuenta. Todas sus versiones llevaban suspensión de doble horquilla delante y multibrazo detrás (Japanese Nostalgic Car).
Al principio se vendía en dos variantes: el Type E más ejecutivo, con interior de cuero, llantas de 15 pulgadas y el sistema CCS como elemento opcional. Para quienes querían un Eunos Cosmo más deportivo, más Cosmo Sport, estaba el Type-S con asientos de tela, llantas de 16 pulgadas, diferencial autoblocante y reglajes de suspensión más rígidos (el CCS lo incorporó más tarde). A partir de 1991 apareció el Type-SX en color Black Forest Mica y llantas BBS, conmemorando la victoria de Mazda con el 787B en las 24 Horas de Le Mans aquel año. Al principio llevaba solo el 13B, pero para 1994 el SX llevaría los dos motores.
El Eunos Cosmo sólo vendería 9.000 unidades, la mitad prácticamente en 1990 y el resto hasta 1995 y muchos de ellos con el motor de dos rotores, de modo que un tres rotores es una rareza. Se vendía a un precio similar al de su rival directo, el Toyota Soarer. El Cosmo con el 13B valía unos 3,3 millones de yenes, lo que ajustando inflación y cambio de divisas actual serían unos… ¡25.350 euros actuales!. El de tres rotores con el acabado de lujo podía salir por unos 5,3 millones de yenes, unos 41.000 euros hoy día.