Si alguien hace las cosas con verdadero rigor en materia de desarrollo de tecnología, es Porsche. Como seguro que estabas pensando, ese caracol es el turbo. Para comprender la importancia del «músculo ingenieril» de la marca, que celebra su 50 aniversario en tema de turbos, vamos a dar un repaso a las 8 generaciones del emblemático Porsche 911 Turbo. ¡Deléitate también con todas las imágenes de la galería!
1ª generación (1974-1977): Porsche 911 Turbo 930
En un momento delicado marcado por la crisis del petróleo, Porsche sorprendió a todos con su primer 911 turboalimentado, conocido internamente como Porsche 930. El motor bóxer de 3.0 litros incorporaba «una caracola» que estiraba la potencia hasta los 260cv, permitiéndole marcar el 0-100 en solo 5,4seg. Algo impensable para la época.
Como ocurría al principio de esta tecnología heredada de la competición, la entrega de potencia resultaba explosiva. Es por ello que se requería un conductor experimentado y mucha concentración al volante. Su combinación de lujo, comfort y aerodinámica le convirtieron en un deportivo apto para la carretera y para la pista.
2ª generación (1978-1989): Porsche 911 Turbo 930 3.3
Aún con el mismo código interno 930, las mejoras fueron significativas. La cilindrada aumentaba hasta 3.3 litros y se añadió un intercooler para enfriar el aire de admisión. La potencia se incrementó a los 300cv, con una velocidad máxima de 260km/h.
Para manejar estos niveles, se incorporaron discos de freno ventilados derivados del Porsche 917 de carreras. Y en referencia a las carreras, se podía personalizar la carrocería bajo pedido con el frontal Slantnose del Porsche 935 de competición. Esto incluía unos deliciosos faros escamoteables.
En 1987, lanzaron el primer 911 Turbo Cabriolet junto la variante Targa. De este modo se comenzó a perpetuar más como un coche de disfrute sinónimo de estatus.
3ª generación (1990-1993): Porsche 911 Turbo 964
El 911 Turbo experimentó un cambio importante en términos de tecnología y diseño. Se introdujo un motor turbo de 3.3 litros y 320cv, que más tarde fue actualizado a 3.6 litros con 360cv en 1992.
Aunque el rendimiento mejoró, el enfoque principal del desarrollo se centró en lograr un comportamiento más civilizado del motor a bajas revoluciones, haciéndolo más adecuado para la conducción en ciudad.
Otra pieza clave de este modelo fue la incorporación de un sistema de tracción total en la versión Carrera 4. Esto lo dotó de un manejo y estabilidad superiores y, aunque solo tenía 10km/h más de velocidad punta que la generación anterior, ahora las curvas se podían tomar más rápido.
4ª generación (1995-1998): Porsche 911 Turbo 993
Sí, volvieron a hacerlo. Estos alemanes presentaron una nueva revolución. Usaron dos turbos en lugar de uno. Esto fue ciertamente importante, porque gracias a su uso combinado se redujo significativamente el «turbo lag», esa explosividad a la hora de entregar la potencia que mencionaba más arriba.
El motor 3.6 de 408cv tenía ahora una respuesta mucho más inmediata, acercándose al comportamiento de un motor atmosférico en ese sentido. Marcaba el 0-100 en 4,5seg gracias al uso de tracción integral incorporada de serie y alcanzaba 290km/h.
También se mejoró el chasis y la suspensión para lograr una conducción todavía más precisa. Por primera vez se instalaron unas llantas 18″ de diseño de radios huecos, reduciendo así la masa no suspendida.
5ª generación (1999-2005): Porsche 911 Turbo 996
Fue el primer modelo refrigerado por agua, con un motor bóxer de 3.6 litros y 420cv. Además, se introdujo por primera vez una caja de cambios automática Tiptronic S de cinco velocidades y frenos cerámicos que mejoraron la capacidad de frenado y la durabilidad en uso intensivo.
El 996 Turbo fue el primer 911 de producción en superar los 300km/h con 305km/h de máxima. Aceleraba de 0 a 100 en 4,2seg y era más rápido que el 911 GT3.
Ofrecieron por primera vez desde 1987 una versión Cabriolet del Turbo que se vendió como churros.
6ª generación (2006-2012): Porsche 911 Turbo 997
La gran innovación de esta generación fue la introducción de turbos de geometría variable (VTG). Esto permitía optimizar la respuesta del turbo a cualquier régimen del motor, mejorando tanto la eficiencia como la potencia.
El 997 Turbo aceleraba de 0 a 100km/h en solo 3,9seg. En su lanzamiento rendía 480cv, pero para 2010 el motor 3.8 subió hasta los 500cv.
Finalmente, se incorporó la opción de caja de cambios PDK de doble embrague, mejorando más la aceleración y respuesta.
7ª generación (2013-2019): Porsche 911 Turbo 991
Con el motor 3.8 produciendo 520cv, era el momento de llevar la dinámica de conducción a un nuevo nivel. Para ello incorporaron un sistema de dirección trasera activa, cosa que mejoraba la maniobrabilidad a bajas velocidades y aumentaba la estabilidad a altas.
La caja de cambios PDK fue rediseñada para cambios más rápidos y el modelo incluía un alerón delantero extensible en varias etapas, así como un alerón trasero ajustable, lo que mejoraba la aerodinámica.
Con todo esto, sumado a una tracción total más refinada, aceleraba de 0 a 100km/h en solo 3,0 segundos y alcanzaba una velocidad máxima de 320km/h.
8ª generación (2020-presente): Porsche 911 Turbo 992
Equipado con un motor bóxer biturbo de 3.8 litros que produce 580 CV en la versión estándar y 650 CV en el Turbo S, este coche es más rápido y potente que nunca. Acelera de 0 a 100 km/h en tan solo 2,7 segundos en la versión Turbo S, estableciendo nuevos estándares para los coches deportivos de producción.
Incluye una transmisión automática PDK de ocho velocidades y mejoras significativas en la tracción total, con un diferencial central que puede enviar hasta el 100% del par motor a las ruedas traseras si es necesario. Además, el sistema de aerodinámica activa ha sido perfeccionado con un nuevo alerón delantero y trasero de ajuste automático, lo que proporciona una mayor estabilidad a altas velocidades.
Es más ancho y cuenta con una suspensión adaptativa que mejora la comodidad en la conducción diaria sin sacrificar el rendimiento en la pista. Ahora, para conmemorar el 50 aniversario del 911 Turbo, los de Porsche han sacado una edición limitada a 1974 unidades (en honor al año de la primera generación). Está cargado de detalles que hacen alusión a dicho aniversario y es un homenaje perfecto a 50 años de innovación.