Los efectos del COVID-19 se están dejando notar en todos y cada uno de los aspectos de nuestra vida, alterándolos en menor o mayor medida y acarreando su correspondiente coste en tiempo y/o dinero. Uno de esos aspectos que se ha visto alterado lo tenemos en quienes están en proceso se obtención de algún tipo de carnet de conducir, y es que a la hora de realizar los correspondientes exámenes se deben enfrentar al actual colapso de las distintas Jefaturas de Tráfico como consecuencia del aplazamiento de casi 450 mil exámenes durante el Estado de Alarma.
Se está viviendo un colapso de casi 450.000 exámenes aplazados
Con el inicio del Estado de Alarma a mediados de marzo se suspendió por completo toda la actividad en autoescuelas y de realización de exámenes teóricos y prácticos por la DGT, en concreto, fueron 180.000 pruebas teóricas y 268.00 prácticas las que no se realizaron durante esos tres meses. Además, algunas autoescuelas al final del confinamiento, o en las primeras fases de la desescalada, empezaron a ofrecer las clases teóricas de manera telemática, lo que fue aumentando el número de aspirantes pendientes de realizar el primer examen cuando aún Tráfico no estaba operativo, no siendo hasta la fase 3 cuando dicha administración empezaría a operar al 100 % de sus capacidades.
A este colapso previo tenemos que sumar dos factores más. El primero de ellos es que el periodo de verano es el aprovochando por la mayoría de jóvenes, tras finalizar el curso escolar y la antigua Selectividad, para apuntarse a la autoescuela y sacarse el carnet, todo un clásico, además de que muchos de nosotros, si nos planteamos obtener algún otro permiso, ya sea el de motocicleta, camión, remolque… las vacaciones estivales se perfilan como el mejor momento para ello. El otro factor lo tenemos en las propias medidas de seguridad contra el COVID-19, como la reducción de aforos para la celebración de pruebas teóricas, y que por no contar con el personal necesario desembocan en nuevos aplazamientos, así como en una relentización de las pruebas prácticas, ya que se necesita más tiempo al desinfectar el vehículo, no viajan dos alumnos, etcétera.
Se realizarán exámenes durante todo el mes de agosto
En este contexto, y debido al malestar general en el alumnado y autoescuelas, el Partido Popular ha pedido la comparecencia de Pere Navarro, director general de la DGT, ante la Comisión Parlamentaria correspondiente del Congreso de los Diputados. Según el portavoz popular en materia de seguridad vial, Óscar Gamazo, la gestión por parte de Navarro provocará el despido de profesores y cierres de autoescuelas.
No obstante, el pasado 2 de junio Pere Navarro ya informó al Congreso de cómo se está procediendo e iba a proceder la DGT, señalando que en primer lugar se había retomado los exámenes teóricos, priorizando las pérdidas de vigencia del permiso de conducir y la obtención y renovación de la autorización para transportar mercancías peligrosas. En cuanto a cómo reducir ese colapso, la primera medida pasa por realizar exámenes durante todo el mes este agosto junto con la posibilidad de que los 829 examinadores que así lo deseen trabajen horas extras, además de contar con el apoyo de los 14 funcionarios itinerantes en aquellas Jefaturas en las que sean necesarios.
