Ayer mi compañero David Villarreal escribía un artículo un tanto doloroso para los aficionados al automóvil. Este artículo hablaba del fin de los cambios manuales, y por muy oscura que pintase la imagen, lo que más duele es reconocer que su «profecía» es cierta. En recientes declaraciones a Motoring, Michael Hugo Leiters – jefe de ingeniería de Ferrari – ha comunicado que la marca no volverá a ofrecer una caja de cambios manual. Todos los futuros Ferrari tendrán cajas de cambio de doble embrague. ¿Por qué?
No digo nada nuevo si os digo que los actuales cambios de doble embrague son superiores a una caja manual en casi todos los aspectos. Son mucho más rápidos, permiten gastar menos combustible y son mucho más cómodos para el día a día. Sólo hay un aspecto en el que no pueden competir con los manuales, y en la implicación del conductor en el pilotaje. Un punta-tacón bien ejecutado en una carretera de montaña es una verdadera delicia, pero controlar a la perfección una caja manual exige cientos de horas de práctica y cierta habilidad.
Cuando una caja automática lo hace mucho mejor que el común de los conductores sin esfuerzo alguno, es lógico que muchos opten por olvidarse del tercer pedal. Hay que reconocerlo, somos minoría, y por mucho que nos guste la épica de los cambios manuales, un buen automático es mejor que el mejor de los pilotos con un cambio manual. Ferrari sabe esto a la perfección, y desde hace años – desde que sus cambios automáticos son competitivos – vienen observando una alarmante caída en los ratios de adopción de cajas de cambio manuales.
Los Ferrari 599 fueron los últimos en disponer de caja de cambios manual en opción, y su ratio de adopción fue ridículo – hasta el punto de que una unidad manual fue subastada por más de medio millón de euros recientemente. Los Ferrari California de primera generación también tenían caja manual en opción, bajo pedido especial durante un par de años producción. De los miles de unidades fabricadas, ¿sabéis cuantas fueron especificadas con caja de cambios manual? Tres. Leedlo de nuevo, TRES. Se cuentan con los dedos de una mano.
Serán muy valiosas en un futuro, pero son la evidencia del futuro. Ferrari no volverá a ofrecer cajas manuales, y la versión oficial dice que se debe a un criterio puramente prestacional: las cajas manuales son incapaces de ofrecer el mismo rendimiento que una caja de doble embrague bien afinada. La realidad es esa, además de la nula demanda por cajas de cambio manuales. Nos guste o no, este es el futuro de las cajas manuales: muy oscuro y ajeno a Ferrari. Por fortuna, aún existen coches como el Porsche 911 R.
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