La industria del automóvil sigue dirigiéndose, cada vez más, a una situación en la que el sector estará dominada por enormes grupos de fabricantes, que aglutinen cada vez más marcas, con el único objetivo de hacer de las sinergias el instrumento ideal para triunfar en un sector cada vez más competitivo. Se confirma oficialmente que Fiat Chrysler y Renault están negociando fusionarse, formando una empresa fruto del negocio combinado, al 50%, de Fiat Chrysler y el Grupo Renault, que se convertiría en la tercera empresa, por volumen de ventas anuales, del mundo, sumando al menos 8,7 millones de coches al año.
Fiat y Renault están negociando la fusión
Se confirma que Fiat Chrysler Automobiles y el Grupo Renault han mantenido negociaciones en los últimos meses, explorando las posibilidades de la fusión, las condiciones y, sobre todo, en qué ámbitos podrían establecerse mayores sinergias, y qué beneficios podrían conseguirse con esta unión.
Según la propuesta inicial de fusión, se espera que las sinergias entre las marcas de ambos grupos, que ahora caminarían bajo el amparo de una empresa común, que se convertiría en una de las mayores de la industria del automóvil en todo el mundo, deriven en un ahorro anual importante, en el orden de miles de millones de euros al año.
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Esta primera propuesta ya deja bastante claros algunos de los objetivos de la fusión. Para la empresa que surja de la unión de Fiat Chrysler y el Grupo Renault será crucial trabajar en las tecnologías que están transformando la industria, principalmente el coche eléctrico (y electrificación en general) y el coche autónomo.
La propuesta también menciona un aspecto importante, que en una situación como esta podría haber generado suspicacias y preocupación entre los trabajadores de ambas marcas. La fusión no conllevará el cierre de fábricas del grupo Fiat, ni tampoco del grupo Renault. Se reconoce que esta fusión pretende mejorar la eficiencia, y los costes de desarrollo y producción en vehículos de todas las marcas del grupo, invirtiendo en plataformas modulares, arquitecturas, mecánicas y tecnologías comunes. Por otro lado, también existe un interés por parte tanto de Fiat, como por parte de Renault, por conseguir que la fusión mejore su presencia en los mercados internacionales. Pensemos que, según las ventas en 2018 de las marcas que formarán este grupo, el grupo resultante sería el cuarto en Norteamérica, el segundo en Europa, Oriente Próximo y África y el primero en Latinoamérica.
Tras esta propuesta, Fiat Chrysler Automobiles y el Grupo Renault siguen negociando una fusión que, salvo sorpresa, acabará produciéndose, a la espera de recibir el respaldo de los accionistas y, por supuesto, de los organismos reguladores del mercado.