Si vives en una zona en la que las nevadas son frecuentes en invierno estarás acostumbrado a sacar la pala para despejar la entrada de tu casa o abrir caminos por los que poder caminar. Para alguien que ha pasado todos los inviernos de su vida en plena montaña, quitar kilos de nieve no es algo que responda a mi concepto de ‘disfrutar’… a no ser que tengas una pequeña flota de vehículos que haga el trabajo por ti. Un Ford Bronco y un Mercedes G63 de radiocontrol capaces de trabajar como una quitanieves me habrían ahorrado más de un resfriado: ¿por qué no lo descubriría antes?
Henry tiene una pequeña flota de coches de radiocontrol de Traxxas que son fieles réplicas de los modelos reales: algunos de ellos han sido adaptados para convertirse en pequeñas máquinas quitanieves con las que esta tediosa labor se convierte en algo de lo más divertido y fascinante. Los vehículos tienen todo tipo de detalles, incluso iluminación que hace que sean más fáciles de encontrar cuando quedan parcialmente sepultados por los copos.
Ford Bronco
Ford Bronco y Mercedes G63
En el canal de Youtube de Henry podemos encontrar los vídeos de sus pequeñas creaciones. El primero en aparecer es un Traxxas TRX4 que viste la carrocería de un Ford Bronco. Armado con una pala quitanieves, limpia el camino de entrada a la casa centímetro a centímetro durante dos horas: es el tiempo que su batería de 5,5 Ah le permite trabajar antes de tener que recargarla.
El otro vehículo que os mostramos es un Traxxas TRX6 con la carrocería de un Mercedes G63 6×6: aquí el proceso de retirada pasa a un nivel superior. El escenario es el mismo, la entrada de su vivienda, pero esta unidad cuenta con una pala y un sistema que le permite recoger la nieve para expulsarla a través de una tolva. Es el compañero ideal para el Ford Bronco: éste crea los caminos y el modelo alemán se deshace de todo lo acumulado en los laterales.
La clave
Los accesorios para crear las quitanieves están firmados por Ryan Butler de Spyker Workshop, que es conocido en su zona por despejar los caminos de sus vecinos con vehículos de radiocontrol mucho más grandes: algunos, incluso, cuentan con orugas para tener un mayor agarre. Crea las piezas necesarias con una impresora 3D, pero la clave está en el hardware de estos vehículos.
Tanto el Ford Bronco como el Mercedes G63 6×6 son pequeños vehículos robustos, pero unos cuantos accesorios no los convierte en máquinas quitanieves: para ello hay que modificarlos agregando servos adicionales para, por ejemplo, subir o bajar la pala. Si a esto le añadimos una impresora 3D estaremos más cerca de poder crear nuestro pequeño ejército de coches de radiocontrol capaces de hacernos la vida más fácil… y divertida.