Ford se ha puesto manos a la obra para resolver uno de los problemas que, tal y como ya os contábamos en diciembre, se había achacado a uno de sus productos más destacados y deseados, el Ford Focus RS. ¿Y qué problema había con el compacto deportivo de Ford? Muchos clientes habían identificado un problema por el cual su Ford Focus RS tendía a expulsar humo blanco, un síntoma claro de la posible entrada de líquido refrigerante en la cámara de combustión. Y un problema que Ford ya estaría resolviendo con una llamada a revisión que incluiría, en muchos casos, la sustitución de la junta de culata.
El problema del Ford Focus RS
De entre todas las averías que jamás querrías sufrir en tu coche, el deterioro repentino de la junta de culata probablemente sea el más temido por todos. Por suerte, el problema del Ford Focus RS no llegó a ser tan grave como para provocar daños irreparables en el motor. En diciembre, Autocar.co.uk confirmaba que según había reconocido un representante de Ford existía un problema por el cual podía filtrarse líquido refrigerante a la cámara de combustión. Y tendría que ver con ciertas tolerancias que podían desplazar levemente la junta, especialmente al alternarse ciclos a diferentes temperaturas, por ejemplo en los arranques en frío.
El problema habría quedado resuelto en las unidades del Ford Focus RS más recientes, y no habría afectado al Ford Mustang, por emplear una aleación diferente en bloque y culata. Pero sí sería necesaria una revisión de los vehículos afectados.
La solución al problema del Ford Focus RS
Según publicaba Jalopnik, Ford ha emitido una llamada a revisión para los vehículos afectados que, insistimos, no plantea un problema de seguridad para los usuarios, ni un riesgo de averías graves si se controlan los niveles de líquidos y temperaturas. Porque entre los síntomas que evidenciarían la existencia del problema estaría un consumo excesivo y prematura del líquido refrigerante del motor.
Ford ya está iniciando la revisión de los Ford Focus RS que podrían estar afectados, y que serían los fabricados entre agosto de 2015 y julio de 2017. Los talleres de Ford en Estados Unidos ya habrían recibido la notificación y el procedimiento de reparación, que implicaría, entre otras cosas, la detección de fugas en el circuito de refrigeración mediante un chequeo de su presión. En función del diagnóstico, la reparación implicaría la sustitución de la junta de culata, o incluso de la tapa de culata.
Con lo cual, todo apunta a que estamos ante la resolución definitiva de un problema que había motivado las quejas de algunos clientes, que ahora estarían recibiendo cartas para proceder al servicio, por supuesto gratuito, sin ningún coste para el propietario, como la siguiente.
Más imágenes del Ford Focus RS en la siguiente galería: